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WASHINGTON, D.C., EE.UU., 26 de junio.- El físico James Franson, de la Universidad de Maryland en Estados Unidos, ha causado revuelo en la comunidad científica al declarar que la velocidad de la luz, descrita por la teoría de la relatividad general, en realidad es menor de lo que se piensa. Si la propuesta de Franson resulta correcta, básicamente todas las medidas utilizadas como base para la teoría cosmológica serán erróneas.
La teoría de la relatividad general, propuesta por Albert Einstein a principios del siglo XX, establece que la luz viaja a una velocidad constante de 299,792,458 metros por segundo en el vacío. Sin embargo, el cálculo falló cuando estalló la supernova SN 1987A en febrero de 1987. En la Tierra se registró la llegada de fotones y neutrinos procedentes de la explosión, como era de esperarse, mas hubo un problema; llegaron 4.7 horas más tarde de lo previsto.
En aquel entonces, los científicos atribuyeron el desajuste a una probabilidad de que los fotones procedieran de otra fuente. No obstante, Franson se pregunta si en realidad la luz no viaja más lento de lo establecido. De acuerdo con el físico, la luz podría desacelerar conforme viaja debido a una propiedad de los fotones conocida como polarización del vacío, en donde un fotón se divide en un positrón y un electrón antes de recombinarse de nuevo en un fotón.
De ser así, esta característica crearía un diferencial gravitatorio entre el par de partículas que tendría un ligero impacto de energía, lo suficientemente significante como para causar un poco de desaceleración durante el viaje de la luz. Si esta polarización del vacío ocurre varias veces en un recorrido de 168,000 años luz, la distancia entre SN 1987A y la Tierra, podría fácilmente sumar la demora de 4.7 horas, de acuerdo con Franson.
Si Franson logra comprobar su hipótesis, todas las medidas hasta ahora utilizadas como base para la teoría cosmológica serán equívocas. La luz del Sol, por ejemplo, en realidad tardaría más en llegar a la Tierra de los pensado, y la luz proveniente de objetos más distantes, como la galaxia Messier 81, llegaría dos semanas más tarde. Las implicaciones son enormes, las distancias entre cuerpos celestes tendrían que recalcularse y teorías ser descartadas. En ciertos aspectos, los astrónomos tendrían que volver a empezar desde cero.
La teoría de Franson ha sido publicada en la revista científica New Journal of Physics. (Muy Interesante)