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Brasil (27 de junio).- Argentina siempre ha sido uno de los países candidatos a ganar la Copa del Mundo, desde hace 24 años no llega a una final y la última vez en ganar una justa mundialista fue en México 86 de la mano de Maradona.
Con 27 años de edad, Messi disputa su tercer mundial (2006, 2010 y 2014), y a pesar de las duras críticas de los argentinos hacia él, en esta justa mundialista se encuentra en primer lugar con cuatro goles, empatado con Neymar y Müller.
Para muchos, el descendiente del Diego llega a Brasil con algunas semejanzas que el ícono futbolero de los argentinos en la Copa del Mundo de México 1986. Maradona llegó a territorio azteca con casi 26 años, siendo este su primer Mundial con la selección mayor, donde disputó siete encuentros y anotó cinco dianas en toda la competencia, llevando a Argentina a levantar el título mundial.
A pesar de que Messi llegaba a Brasil como la estrella de la selección argentina, el peso era mayor, ya que los argentinos reclamaban al jugador del Barcelona jugar como lo hacía en su club, algo que no se notaba cuando participaba con su selección y que su bajo nivel recientemente preocupaba a propios y extraños.
El pupilo de Pep Guardiola relució y calló críticas, primero frente a Bosnia, donde Messi resucitó a una Argentina que parecía haber sufrir más de la cuenta, dándoles los primeros tres puntos de nueve disputados.
El ingenio y la esperanza volvía a los pies de Lio frente a Irán, un equipo que para muchos era el más fácil, pero que se escatimó de más. Los leones persas hicieron sudar a los dirigidos por Sabella durante 90 minutos, pero desde un tiro de larga distancia en el minuto 91 Messi apareció y salvó a su selección de un empate con sabor a derrota.
La prensa argentina comenzaba a dar crédito a la Pulga, empezaban a creer en él; el legado de Maradona se nota en los botines del ‘10’, quien frente a Nigeria y con su buen dominio de balón marcó su primer doblete mundialista, llegando así a cuatro goles en la primera fase.
Lionel está a un tanto de igualar lo logrado por su antecesor en México 86. Frente a Suiza, en los octavos de final, el jugador de la escuadra catalana podría conseguir su quinto gol, lo único que le faltaría a quien para muchos es el mejor jugador del mundo, es ganar un Mundial y así poder entrar a la historia como una de las grandes figuras en la historia del futbol.- (Milenio)