Guadalajara (4 de junio) Las cirugías estéticas en los hombres están en aumento. La estimación es que en los tres últimos años han aumentado de 5% a 20% las intervenciones, básicamente por rejuvenecimiento, lipólisis de papada, rinoplastia e injerto de cabello. El sexo masculino desde hace por lo menos 20 años ya se practicaba operaciones, pero en lo “oscurito”, sin que la familia y los amigos lo supieran y con la complicidad del médico.

Lo anterior lo afirma la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva.

“Hace 20 años trabajaba con un cirujano plástico y tenía una puerta por donde atendía a los hombres, lo que pasaba es que antes era mal visto que un hombre se practicara alguna cirugía de ese tipo, pero siempre se han dado; hoy es muy común, ya no tienen vergüenza ni prejuicios”, afirma Martha Bárcena Ontiveros, quien es enfermera y ayudante de anestesiólogo en un conocido hospital de la ciudad.

La edad en que los varones se practican las cirugías va de entre 24 y 40 años. Y llegan a pagar miles de pesos para mejorar su apariencia física, según la Sociedad de Cirujanos Plásticos de Estados Unidos.

Martín Lizárraga fue diagnosticado con obesidad mórbida, por lo cual de inmediato pensó en someterse a una liposucción; sin embargo, el médico especialista que lo atendió le explicó que primero debería someterse a un régimen alimenticio drástico, antes de realizarse el procedimiento, ya que de lo contrario el resultado no sería favorable.

Durante seis meses Martín estuvo a régimen alimenticio, actividad física diaria, manejo psicológico y medicamentos hasta que llegó el día de la cirugía estética.

“Bajé 20 kilos en seis meses antes de la operación, pero yo sabía que después de la cirugía debía seguir cuidándome, de lo contrario, el sacrificio no serviría de nada. La primera vez que me vi en el espejo, la verdad fue una emoción inexplicable, desde niño recibí decenas de apodos, fui ‘buleado’ y desde ese día todo ha sido diferente: salgo con mujeres, antes nadie me aceptaba una cita; hoy tengo una vida normal y le gusto a las damas, todo gracias a la liposucción”, afirma Lizárraga, de 32 años y vecino de Las Águilas.

Al preguntarle si se realizaría otra cirugía comenta: “La verdad no lo sé, me ayudó mucho, pero me cuido demasiado porque fue doloroso, pero económicamente, a dos años de la operación, todavía estoy pagando el financiamiento de 60 mil pesos que me costó. Así que primero debo terminar de pagar”.

Auge en Turismo de salud

El turismo de salud es uno de los sectores productivos de mayor crecimiento en los últimos años en el mundo, debido a los movimientos fronterizos de turistas que buscan tratamientos a costos competitivos y de calidad.

Los extranjeros que se practican intervenciones en Guadalajara pueden ahorrarse hasta 70% en comparación con Estados Unidos, según las cotizaciones entre un país y otro.

Jalisco cuenta con la infraestructura necesaria para formar parte de la oferta médica más importante del mundo, incluso, Guadalajara tiene fama de ser la ciudad menos costosa para la realización de cirugías plásticas, a diferencia de Monterrey, Tijuana y la Ciudad de México. Eso se debe al número de médicos certificados que existen, coinciden especialistas.

En la capital de Jalisco hay 14 hospitales particulares certificados por el Consejo de Salubridad General, además, otros 10 nosocomios están en proceso de certificación nacional. Las especialidades que más demanda tienen son la cirugía plástica, bariátrica, ortopedia, traumatología y servicios dentales.

Las cirugías más costosos en Guadalajara son los implantes de glúteos, de aproximadamente 65 mil pesos, seguido de Lifting facial o para rejuvenecer rostro, en 45 mil pesos, entre otros.

Julie Smith vive en Ajijic durante cinco meses del año; el resto del tiempo regresa a su hogar en Columbus, Ohio. Cuando se dio cuenta que el tiempo había actuado sobre su cuerpo, pensó en algunas intervenciones quirúrgicas para seguir “joven y bella”, por lo cual buscó en su país, cotizó, se informó sobre los problemas más comunes, pero el costo resultaba muy alto para sus posibilidades económicas.

Vía internet inició una búsqueda sobre costos y beneficios de someterse a las cirugías estéticas deseadas en Guadalajara y, al final, optó por una clínica local.

“Me practicaron dos cirugías, la primera fue levantarme el busto, al bajar de peso algunas cosas perdieron su lugar, y por eso decidí operarme; una semana después me intervinieron de las chaparreras, todos salió bien, y el costo fue mucho menor. Aquí pagué 12 mil dólares con todo incluido, mientras en mi país hubiera tenido que pagar casi 45 mil dólares. Lo importante es que quedé satisfecha, mejoró mi autoestima… es magnífico sentirse feliz, el paquete incluyó hasta el taxi”.

Pululan los médicos “patito”

En México hay mil 800 médicos en estética y reconstrucción certificados. Sin embargo, por cada cirujano de éstos hay 20 usurpadores. Por ello los pacientes deben verificar que el galeno esté certificado, indica el presidente del Colegio y Sociedad de Cirujanos Plásticos, Estéticos y Reconstructivos de Jalisco, Luis Miguel Salinas Larios.

En distintas colonias de la Zona Metropolitana de Guadalajara los cirujanos certificados ven el crecimiento de las llamadas clínicas “patito”, las cuales ponen en riesgo a los pacientes, por lo que se están combatiendo. Para ello, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) intensifica inspecciones y verificaciones a los establecimientos que prestan dichos servicios.

“Un cirujano plástico certificado por lo menos estudió 14 años y siempre está en constante preparación, con cursos, conferencias, certificándose cada cinco años. En cambio existe gente que solamente hace la carrera de medicina y toma un curso de cirugía estética y de inmediato establece una clínica y está usurpando las funciones. La regulación de las cirugías está mencionada en los artículos 81 y 272 bis de la Ley General de Salud Federal”.

El que un médico esté certificado implica que está actualizado y capacitado, lo que brinda una mayor confianza a la ciudadanía. Los especialistas deben tener las autorizaciones y certificación correspondientes, así como las instalaciones con las condiciones sanitarias adecuadas.

La Cofepris dio a conocer que de 2013 al mes de abril de 2015 se han realizado mil 500 verificaciones y 65 suspensiones en clínicas estéticas en el país, donde por lo regular se practicaban cirugías plásticas y tratamientos estéticos sin los controles sanitarios establecidos.

Las principales irregularidades encontradas en dichos sitios fue: el establecimiento no contaba con aviso de funcionamiento y responsable sanitario; personal no calificado y acreditado como profesional de la salud daba consultas y recetaba productos; había “productos milagro” sin denominación, así como leyendas alusivas a indicaciones terapéuticas. También se vendían insumos para la salud caducos, sin etiquetado y sin número de lote.

La razón por la que se han multiplicado los negocios “patito”, según Alfonso Vallarta, presidente de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica Estética y Reconstructiva (AMCPER), es por el desconocimiento de las personas sobre los métodos y procedimientos quirúrgicos.

“Lo primero que un paciente debe asegurarse es que el cirujano está certificado por la AMCPER, que el quirófano esté certificado por la Secretaría de Salud y preguntar por todos los riesgos y dudas que se tengan, previo a entrar al quirófano”.

Por su parte, Salinas Larios afirma: “Toda intervención quirúrgica tiene un riesgo y las cirugías estéticas implican cierto riesgo también. Las complicaciones pueden ser una infección, rechazo a implantes o reacciones alérgicas, pero los riesgos son los de cualquier intervención”.

La Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Jalisco también realiza monitoreos de publicidad y revisión de consultorios para detectar y sancionar a quienes ofertan procedimientos milagro. Para cualquier denuncia, comunicarse al 01800 SANIJAL (7264525).

NUMERALIA Jugosa derrama

2,000 millones de pesos es la derrama económica de las cirugías estéticas.

5% crece en promedio cada año, el mercado de las cirugías estéticas.

9,874 clínicas registradas ante la Cofepris.

65 clínicas “patito” suspendidas en el país, primordialmente en Estado de México, Distrito Federal y Querétaro.

CERTIFICADAS Costos en clínicas

Bolsas de Bichat (excesos en mejillas)

6 mil 500 pesos.

Gastos hospitalarios y honorarios médicos.

Cirugía de orejas

22 mil pesos.

Gastos hospitalarios y honorarios médicos.

Cirugía de párpaados

De 18 mil a 27 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material y medio día de recuperación.

Marcaje abdominal o ginecomastia

30 mil pesos.

Incluye gastos hospitalarios, medicamentos, material y medio día de recuperación.

Cirugía estética de nariz

30 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material, un día de recuperación y todas las consultas post quirúrgicas.

Cirugía de brazo

35 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material, un día de recuperación y todas las consultas post quirúrgicas.

Implantes de senos

40 mil pesos.

Con garantía de por vida, honorarios médicos, gastos hospitalarios y medio día de recuperación.

Lipoláser

40 mil pesos.

Honorarios médicos, gastos hospitalarios y un día de recuperación.

Levantamiento de senos

40 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material, un día de recuperación y todas las consultas post quirúrgicas.

Reducción mamaria

40 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material, hospitalización y todas las consultas post quirúrgicas.

Lifting facial o rejuvenecer del rostro

45 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material y un día de recuperación.

Implantes de glúteos

65 mil pesos.

Gastos hospitalarios, medicamentos, material y una noche de recuperación.- (Agencias)