México (11 de marzo).- Por medio del cotejo de huellas dactilares el gobierno federal confirmó que fue abatido ayer Nazario Moreno González, alias El Chayo, fundador y adoctrinador del cártel de Los Caballeros Templarios, durante un enfrentamiento con elementos de las secretarías de la Defensa Nacional (Sedena) y de Marina (Semar) en Michoacán, cuando se resistió a ser capturado.

Durante un mensaje a medios de comunicación, Monte Alejandro Rubido, secretario Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), informó que con la muerte de Nazario Moreno el gobierno federal da “el mayor golpe” a la estructura de la organización de Los Caballeros Templarios.

El funcionario dijo que durante las primeras horas de ayer, a 13 kilómetros de la cabecera municipal de Tumbiscatío, soldados y marinos ubicaron a Nazario Moreno, quien respondió disparando y, al repeler la agresión, los militares abatieron al líder del cártel.

Conocido también como El más Loco, el fundador e ideólogo de la organización de La Familia, y también creador de Los Templarios, encontró la muerte mientras festejaba su cumpleaños con una comida, aseguraron integrantes de las autodefensas en la región.

El Consejo de Autodefensas de Michoacán incluso se adelantó a difundir la información sobre la caída del líder templario al identificar el cuerpo, luego de que a algunos miembros se les permitió el ingreso, junto con el médico que atendía a El Chayo, en el cuartel de la 43 Zona Militar en Apatzingán.

Al parecer, en el tiroteo también perdieron la vida varios de sus escoltas al intentar evitar la captura en las inmediaciones de Tumbiscatío. Con su muerte, se echa por tierra la versión oficial del calderonismo de que el capo ya había sido abatido hace tres años.

“El 10 de diciembre del año 2010 se anunció que en un enfrentamiento suscitado el día anterior entre elementos de la Policía Federal y un grupo delincuencial que opera en Michoacán había sido abatido Nazario Moreno González, y se argumentó que su cuerpo fue recogido por integrantes del grupo delictivo, por lo que no existieron evidencias de dicho fallecimiento”, refirió Rubido ayer en conferencia.

Anoche, el ex vocero Alejandro Poiré, reconoció que los datos que difundió sobre la muerte de El Chayo en 2010, “no fueron lo suficientemente precisos”.

Si estaba vivo

Destacó que a partir de la presencia de fuerzas federales en Michoacán y del acuerdo de apoyo del gobierno federal, tanto el comisionado Alfredo Castillo como otros funcionarios recibieron constantes reportes de que El Chayo estaba vivo y operaba al frente de la organización.

Nazario Moreno, agregó, estaba a cargo de la comisión de delitos como extorsión, secuestros, contra la salud, entre otras actividades; “esta persona era reconocida por su peligrosidad, se le señala como responsable de múltiples homicidios y por ser encargado de las tareas de adoctrinamiento del grupo que encabezaba hasta el día de hoy”.

Con base en esa información, las diversas áreas de inteligencia del gabinete de seguridad del gobierno federal realizaron una exhaustiva investigación y se corroboró que Nazario Moreno seguía vivo, por lo que se diseñó una estrategia para su captura. Rubido indicó que las fuerzas federales establecieron un cerco de seguridad en la zona en la que se movía Moreno, lo que propició que éste disminuyera al máximo su perfil y su seguridad.

“La madrugada de hoy fue interceptado por elementos de Sedena y de Semar a 13 kilómetros de la cabecera del municipio de Tumbiscatío, y cuando éstas pidieron que se entregara abrió fuego, el cual al ser repelido le causó la muerte”, precisó.

Los peritajes

Tomás Zerón de Lucío, director en jefe de la Agencia de Investigación Criminal de la Procuraduría General de la República (PGR), explicó que la Coordinación General de Servicios Periciales realizó el estudio de dactiloscopia forense, para identificar el cadáver.

“Se concluye en positiva la identidad de Nazario Moreno González al 100%; asimismo se continúan realizando estudios de genética e identificación fisonómica que en breve serán dados a conocer”, expresó el funcionario.

Pericialmente la PGR realizó un comparativo de las huellas de ambas manos de El Chayo, con las que aparecen en su cartilla del Servicio Militar Nacional, con las de su credencial de elector y con las que se tienen en el sistema AFIS, que resultaron ser idénticas.

La ubicación del capo, detalló Monte Alejandro Rubido por su parte, fue resultado de trabajos y reportes de inteligencia destacando tres hechos recientes: el 7 de febrero pasado durante un patrullaje se aseguró a una persona armada quien viajaba en una camioneta con armamento y droga, quien declaró estar al servicio directo de Nazario Moreno, líder de los Templarios.

El 4 de marzo pasado se localizaron tres tambos de plástico con capacidad para 200 litros cada uno, que estaban enterrados, conteniendo armamento. Al seguir la investigación, el 7 de marzo en la misma región fueron asegurados un automóvil y equipo de comunicación propiedad de El Chayo Moreno.- (El Universal)