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PACHUCA, Hidalgo, 19 de mayo.- Gustavo Matosas saltó como energúmeno al momento en que Francisco Chacón pitó el final del encuentro. El técnico uruguayo abrazó a sus jugadores y les agradeció su entrega que le permitió a los Esmeraldas de León conseguir la séptima corona en su historia, y emular lo hecho por Pumas al lograr el Bicampeonato.
Los Panzas Verdes se levantaron del marcador adverso que sufrieron en el Nou Camp (2-3) y con anotaciones de Mauro Boselli (66') y Juan Ignacio González (111') le dieron la vuelta a la tortilla para imponerse por marcador de 4-3 ante unos Tuzos que se vieron pasivos, que no tuvieron un buen desempeño, y que a la poste les costó el revés. El encuentro no respondió a las expectativas. Parecía un choque de temporada regular, con dos equipos que pelotearon durante los tiempos extras, y cuando los verdes apretaron fue que llegó el tanto de González que definió la serie.
La maldición persigue a Enrique Meza. El estratega del cuadro hidalguense sufrió su cuarto revés consecutivo en una final, y eso se reflejó en su rostro. Abandonó la cancha cabizbajo. Respiró profundo antes de acercarse a sus jugadores, seguramente buscando una explicación de los motivos que le impiden romper con esa maldición.
León simplemente tuvo un momento de lucidez para ganar la final. No dieron un buen partido, pero hicieron lo suficiente, además de que se repusieron de que, al inicio del partido, salieron lesionados Jonny Magallón y Franco Arizala cuando el cronómetro apenas marcaba el minuto 7.
Y aún faltaba un problema más, cuando Mauro Boselli también dejó el terreno de jugo por otro problema muscular. Dichos contratiempos llegaron a inclinar la balanza a favor de los Tuzos, que no la supieron aprovechar, no salieron en su noche, el desempeño fue pobre y fue bien aprovechada por los Esmeraldas.
Cuando parecía que Pachuca tenía controlado el partido, llegó el primer gol de los visitantes con un certero remate de cabeza de Boselli, y cerca de los penales, otro cabezazo de Juan Ignacio González finiquitó la obra.
Aburrido partido, gran resultado para León. Ganó el contudente, el que no hizo las cosas tan mal porque ambos no tuvieron los méritos para ganar el campeonato pero uno tenía que salir airoso y los Panzas Verdes se alzaron con el Bicampeonato, ante un Pachuca que hizo todo lo posible por perder.
Con el triunfo de ayer en Pachuca, León se convirtió en el segundo bicampeón en la era de los torneos cortos, sumándose a la hazaña lograda por los Pumas de la UNAM en el año 2004.
En dicha ocasión, los universitarios comandados por Hugo Sánchez ganaron el torneo clausura al imponerse a Chivas en serie de penales tras 210 minutos intensos y ríspidos que arrojaron un 1-1 global.
En el apertura, los universitarios tuvieron un campeonato incierto pero lograron colarse entre los mejores ocho para dar cuenta de Veracruz, Atlas y llegar a la final ante el favorito Monterrey, al que vencieron en la Ida por 2 a 1 y pusieron el broche de oro en el Tec con un solitario gol de Francisco Fonseca.
Los Pumas conseguían esta hombrada mientras los esmeraldas cumplían su segundo año en la Primera División A. Ahora 10 años después, los Panzas Verdes igualaron a los pupilos de Hugo Sánchez tras despachar en la Final del Apertura 2013 al América y en la del Clausura 2014 al Pachuca.
De los de Coapa dieron cuenta por global de 5 goles a 1, terminando en el Estadio Azteca un gran torneo en el que fueron muy regulares y contundentes, incluso anotando 17 goles en los 6 partidos de la fase final.
Entre libertadores, liga y jugadores convocados a la Selección Nacional, León tuvo un Clausura 2014 muy complicado. Dio prioridad al torneo continental, en el que se quedó en Octavos de Final, y entre rebotes logró clasificarse como último a la Liguilla en el torneo local.
Tras eliminar en fila a los dos conjuntos más regulares del torneo, La Fiera llegó a un inédita Final ante los Tuzos, a los cuales vencieron ayer contra todos los pronósticos tras perder la Ida como local.
En lo que respecta a toda la historia de la era profesional en México, sólo 7 equipos se han podido coronar dos o más veces de forma consecutiva.
El primero fue justamente el León, quien ganó las campañas 1947-1948 y 1948-1949 además de un torneo de copa, lo que lo hizo acreedor al mote de Primer Campeonísimo. Por su parte el Guadalajara lo consiguió en dos ocasiones; ganó cuatro ligas entre 1958 y 1962, y posteriormente las de 1963-1964 y 1964-1965.
Toluca se unió al selecto grupo al consagrase en la temporada 1966-1967 y revalidar su título en la siguiente campaña. Luego fue Cruz Azul el que ganó tres campeonatos entre 1971 y 1974, y otros dos entre los años 1978 y 1980.
América, que tuvo su década más prolífica en 1980 al ganar la mitad de las ligas en disputa, fue el quinto club en ser multicampeón. Ganó las ligas 1983-1984, 1984-1985 y el torneo Prode 85; posteriormente triunfó dos veces entre 1987 y 1989.
Los Rayos del Necaxa fueron el último equipo en ser bicampeón en torneos largos justamente en las últimas dos competencias bajo ese formato. Lo hicieron en las temporadas 1994-1995 y 1995-1996, y pudieron haber logrado el tricampeonato; sin embargo, cayeron de forma polémica en la final del Invierno ‘96 ante Santos Laguna.
Ahora, el León se convierte en el más reciente bicampeón después de vencer 5-4 al Pachuca en una dramática final.
Hace seis meses había logrado coronarse derrotando 5-1 al América en el Estadio Azteca. (Agencias)