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MERIDA, Yucatán, 19 de junio.- La depresión tropical número 2 ocasionó ayer martes fuertes precipitaciones pluviales, caída de árboles, y postes y vientos máximos de 77 kilómetros por hora, situación que originó la movilización de elementos policiacos y del H. Cuerpo de Bomberos.
Las ráfagas de viento tuvieron una velocidad de 77 kilómetros por hora durante un lapso de 15 minutos, lo que generó varias afectaciones en diferentes puntos de la ciudad, mientras que en el interior del Estado se reportaron inundaciones.
Las lluvias intensas y los vientos violentos provocaron la caída de algunos árboles, incluso sobre la avenida Prolongación de Montejo, en una escuela de la colonia Portes Gil, así como postes del alumbrado público que se vieron afectados en la colonia Alemán.
Asimismo, el municipio de Progreso se quedó sin energía eléctrica desde la tarde del lunes luego de que cayera un rayo en la subestación de la CFE. A pesar de los trabajos para reabastecer el suministro de energía eléctrica, hasta el mediodía de ayer martes el servicio no se había regularizado.
El Gobernador del Estado, Rolando Zapata Bello, manifestó que existe una sólida coordinación entre la Unidad Estatal de Protección Civil y las Unidades Municipales, así como con el sistema de monitoreo que realiza la CONAGUA a fin de tomar las previsiones de acuerdo a las zonas y municipios donde se han sentido con mayor fuerza los estragos del sistema tropical.
El Mandatario reiteró que el Gobierno estatal está dando atención permanente y seguimiento al fenómeno, "dándole apoyo a todos los municipios que, derivado de estas contingencias, sufran afectaciones".
Sobre la posibilidad de abrir albergues, Zapata Bello dijo que se tiene un protocolo de protección civil que irá marcando, de acuerdo a los diferentes indicadores, qué es lo que procede "y en este caso estamos dando un seguimiento muy exacto".
Mérida, inundada.
El ingreso de la depresión tropical No. 2 de la temporada, por las costas de Belice, propició ayer en Yucatán lluvias torrenciales y fuertes vientos, dejando un saldo en Mérida de casas inundadas, autos averiados, árboles caídos y apagones en algunas zonas de la ciudad, lo que originó que varios semáforos dejaran de funcionar ocasionando accidentes, según una nota publicada por SIPSE.
Un rayo cayó el lunes justo sobre el centro de máquinas de la Comisión Federal de Electricidad en Progreso.(DdeY)
Pero los daños mayores del temporal, que llegó acompañado de descargas eléctricas, se registraron en amplia zona costera, pues un rayo cayó justo sobre el centro de máquinas de la Comisión Federal de Electricidad en Progreso, a las 17:03 horas del lunes, y dejó sin el fluido a 26 mil 477 usuarios de ese puerto, Telchac Puerto, Chuburná, Chicxulub y Chelem, incluyendo al muelle de la API.
Del cuarto de máquinas salió densa humareda y casi de inmediato llegó la unidad 786 de Bomberos, pero los tragahumos no podían entrar por temor a un cortocircuito.
La CFE bajó las cuchillas para evitar desastres mayores y permitió la apertura de un boquete en el muro posterior para que los bomberos pudieran acceder.
Para evitar que amplia zona costera quede a oscuras tanto tiempo, la CFE realizó conexiones alternas y hasta las 20:15 horas del mismo lunes seguían esos trabajos. Se había reestablecido el servicio a cinco mil 101 clientes y se esperaba completar el 100% a las 6 de la mañana de ayer martes. Se calculó que las labores tarden unas nueve horas.
En Mérida, los vientos generados por la depresión tropical alcanzaron 77 kph y su fuerza se sintió en buena parte de la ciudad, donde se registró la caída de árboles.
La fuerte lluvia inició a partir de las 14:00 horas de ayer martes, acompañada de descargas eléctricas que hicieron vibrar cristales de casas y negocios por toda la ciudad. En el centro, muchas personas que permanecían en las calles corrieron a buscar refugio en los comercios.
En zonas del Poniente, cercanas a Plaza Dorada, se registraron inundaciones y fue necesaria la participación de bomberos y personal de Servicios Públicos Municipales para desaguar la zona.
“Estamos como en Venecia”, exclamó una vecina de Pensiones-Fovissste, una de las zonas afectadas por las inundaciones. (Vanguardia/SIPSE)