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MERIDA, Yucatán, a 28 de junio de 2013.- La terquedad del PRI de tratar de exhibir irregularidades que no existen en la adquisición de las luminarias, termina de confirmar que en ese Partido hay serios problemas para entender y admitir la importancia de la participación de la sociedad civil en los asuntos públicos, declaró Gerardo Bolio de Ocampo, presidente del CDM del PAN en Mérida.
-Todos, quienes hemos estado al tanto de la forma en que se llevó al cabo la adquisición de las luminarias, sabemos que las decisiones sobre este asunto corrieron a cargo de un consejo ciudadano, integrado por gente con prestigio público -agregó.
Expresó que es una ofensa que el dirigente del PRI se atreva a decir que el Ayuntamiento “se haya aprovechado de la buena fe” de quienes integraron el consejo.
“Es un insulto a la participación ciudadana porque el proceso de compra estuvo a cargo de gente que merece total respeto, algo que el PRI, como lo señalé la vez anterior, desconoce”, recalcó.
-Si el Ayuntamiento hubiese actuado al margen de las decisiones del consejo ciudadano, estamos seguros que los primeros en señalarlo serían los propios integrantes del consejo, cosa que no ha ocurrido hasta el día de hoy, porque la autoridad municipal ha sabido acatar las decisiones -dijo.
Poner en duda lo relacionado con la adquisición de las luminarias, manifestó, es poner en duda la capacidad, la probidad y la legitimidad del consejo ciudadano, y por supuesto de sus integrantes.
Las declaraciones y la postura del directivo del PRI va en sentido contrario a la que manifestó hace algunos días Nicolás Madahuar Boehm, presidente de la Coparmex Mérida es integrante de ese consejo, quien calificó el ejercicio ciudadano como “un hecho sin precedente que pone un parámetro y antecedente para todo el país”.
-El objetivo del PRI es perverso porque sus reiteradas descalificaciones tienen como fin desalentar la participación social en procesos delicados, como diciéndoles “no se metan” porque a ustedes también les toca –enfatizó
Cualquier partido o autoridad que se precie de ser responsable y democrático, debería de incentivar la participación social en la vida pública y política, hoy se confirma que el PRI es la antítesis de la democracia.
Por último, quiero recordar al PRI que fueron sus autoridades las que causaron el verdadero daño patrimonial a los meridanos, con un servicio pésimo, mediante un contrato firmado en condiciones terribles.
-¿Esto no lo van a denunciar? –cuestionó. No, eso no lo harán porque se ha erigido en defensores de la empresa que en su momento ellos mismos favorecieron de modo descarado. A esto le llaman “congruencia”.