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MEXICO, D.F., 18 de diciembre.- Una venganza personal o un ajuste de cuentas son hasta el momento las principales líneas de investigación que se siguen sobre el homicidio de Roberto Fortunato Rojas, líder de la agrupación musical Kche-Bandazza.
La Procuraduría capitalina cuenta con la colaboración de una acompañante del músico, quien fue testigo presencial de los hechos registrados, ayer por la noche, en calles de la colonia San Francisco Culhuacán, delegación Coyoacán.
Según la averiguación previa del caso, la mujer se encontraba en compañía del músico en su domicilio particular, ubicado en la colonia Roma; alrededor de las 22:00 horas, el vocalista recibió una llamada para concretar, supuestamente, la firma de un contrato para una presentación próxima.
La testigo señaló que ambos abordaron un taxi y al llegar a la avenida Taxqueña, entre Canal Nacional y la calle Emiliano Zapata, el vehículo de alquiler hizo alto total para ubicar la dirección exacta donde se realizaría el encuentro de negocios.
Sin embargo, señaló, rápidamente se acercó un hombre que vestía traje oscuro y disparó en varias ocasiones desde la parte posterior del vehículo; ella señala que intentó resguardarse entre los asientos de la unidad y que posteriormente se percató que su acompañante permanecía inerte, además de que el conductor del taxi se quejaba por una herida de arma de fuego.
El agresor se retiró inmediatamente del lugar y en ningún momento les exigió la entrega de sus objetos de valor, según consta en la indagatoria que inició el agente del Ministerio Público de la Coordinación Territorial Coyoacán 3.
Elementos de la Unidad de Investigación Cibernética analizan el aparato de telefonía celular, para conocer la procedencia de las últimas llamadas que motivaron el supuesto encuentro de negocios al que debía asistir el músico.
Mientras tanto, el representante social citará en breve al representante y los integrantes del grupo Kche-Bandazza para indagar sobre las personas que los contrataron en sus últimas presentaciones.
La testigo de los hechos se encuentra bajo resguardo de agentes de investigación, y se espera que después de que se recupere de una crisis nerviosa pueda proporcionar mayor información sobre el agresor y así conocer su identidad. (Agencias)