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Marco Gutiérrez*
Recientemente el INEGI dio a conocer los resultados del Producto Interno Bruto (PIB) real por entidad federativa para el año 2008. El estado de Yucatán presentó apenas un crecimiento económico de tan sólo 0.2% en relación con el año 2007, lo cual contrasta con la dinámica de crecimiento económico observada en la entidad entre 2003 y 2007, superior al 5% en promedio anual.
Lo anterior significa que la economía yucateca no avanzó en cuanto a creación de valor, dicho de otra forma, las posibilidades de mejora en el nivel de vida de la población se esfumaron; lo peor por venir es que el año 2009 del que todavía no se dan a conocer cifras del PIB, pinta peor que el 2008, considerando la presente recesión económica internacional que ha golpeado seriamente a todos los países.
En 2008, el valor de la producción del sector Primario de la economía que agrupa a la Agricultura; Ganadería; Silvicultura; Caza y Pesca, disminuyó 8.1% en relación al año anterior. El valor producido por la Industria Yucateca que incluye a la Minería; Electricidad, Gas y Agua; Construcción; y Manufacturas, cayó 7.5% en relación a 2007.
Las caídas que se observaron en el Sector Industrial con mayor impacto para la economía de la entidad fueron: la de la Industria de la Construcción con menos 15.4% y, la de la Industria Manufacturera con menos 2.9%, ambas con efectos muy serios sobre el nivel del empleo. La Minería, si bien de menor impacto para la economía yucateca, presentó una contracción impresionante de 28.9%.
El sector terciario o de Servicios es el único que mostró en 2008 un crecimiento de 3.5% en relación con el periodo anterior, manteniendo con ello apenas a flote a la economía de Yucatán; destacaron los Servicios Financieros y los Seguros con un crecimiento de 28.8%; seguidos de los Servicios de Salud y de Asistencia Social que aumentaron 9.5%; y el tercer lugar lo ocuparon los Servicios Profesionales, Científicos y Técnicos con un crecimiento de 7.7% para el mismo periodo de tiempo ya indicado.
Dentro del mismo Sector Terciario, Hoteles, Alimentos y Bebidas aumentaron 5.6%; los Servicios Inmobiliarios se incrementaron 3.9%; en tanto que el Comercio lo hizo en 3.6%.
En cuanto al empleo, según cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se han perdido entre 2008 y 2009 un total de 3,544 empleos formales.
Por otra parte, a partir de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del INEGI, que incluye al empleo informal, se pueden derivar para Yucatán las siguientes observaciones: entre 2007 y 2008 el sector primario empleó a 534 trabajadores más, lo cual significa que la productividad por hombre empleado disminuyó, toda vez que como se dijo antes el PIB del campo yucateco resultó negativo en 2008. Un dato inquietante, es que entre el cierre del año 2008 y el cierre de 2009 el empleo en las actividades primarias de la entidad disminuyó en 3,044 trabajadores, lo que no augura buenos resultados de producción de este sector para 2009, mismos que serán publicados por el INEGI hasta el año 2011, para tranquilidad de muchos.
El empleo en la industria yucateca ha estado en caída libre durante los últimos tres años, ya que según el INEGI entre 2007 y 2008 se perdieron 3,311 empleos y entre 2008 y 2009 se han perdido 12,888 adicionales cifra por demás alarmante.
En los últimos tres años la Industria de la Construcción perdió 9,413 empleos, y solamente en 2009, la industria manufacturera de la entidad dejó sin trabajo a 7,563 personas.
El crecimiento del empleo se observó básicamente en el Sector Servicios de la economía donde se generaron 26,459 empleos entre 2007 y 2008, destacando los Servicios Sociales (Educativos, de Esparcimiento, de Salud, entre otros) en los que se generaron 7,252 ocupaciones; Servicios Financieros con 5,024 nuevos puestos de trabajo; y Restaurantes y Hoteles con 4,151 adicionales. Cabe destacar la participación del Gobierno del Estado de Yucatán en este rubro, contribuyendo con la generación de 4,601 empleos en 2008, a los que se adicionaron 807 el año pasado.
Con estos resultados, ¿no sería conveniente repensar la asignación de recursos económicos escasos en el estado de Yucatán, reorientándolos especialmente hacia aquellas actividades del sector terciario yucateco que continúan generando valor y empleo a pesar de la recesión mundial?
*Académico de la UVM, Campus Mérida