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México (3 de febrero).- En la fase terminal del Instituto Federal Electoral (IFE), los consejeros electorales comenzaron a preparar el finiquito de eseórgano, cuya extinción inició con la partida de 5 consejeros, y a ellos se sumarán, en breve y hasta en tanto no haya Instituto Nacional Electoral (INE), los titulares de la Contraloría General y de la Secretaría Ejecutiva.
Por lo pronto, el secretario ejecutivo del instituto, Edmundo Jacobo Molina, representante legal de ese órgano y quien deberá entregar las llaves a quienes lleguen como nuevos consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE), está ya en proceso de cierre de administración.
Además de las tareas regulares del IFE, y de los preparativos del proceso electoral federal 2014-2015, se alista ya la entrega de bienes materiales, humanos, financieros, así como el reporte del estado que guarda la administración en general, informó.
“Me han pedido los consejeros que preparemos todo eso y hay un trabajo muy intenso de todas las áreas; están levantando los documentos correspondientes para la entrega del IFE”, dijo.
Pero el instituto podría enfrentar un problema legal justo en la etapa de transición de IFE a INE, si esa entrega de estafeta se empata con el término del periodo para el que fue nombrado el contralor general del instituto, Gregorio Guerrero Pozas, cuyo mandato concluye el próximo 30 de abril.
Esa es la misma fecha límite que los diputados tienen marcado como plazo para nombrar a los consejeros del INE, y su toma de posesión marcaría el nacimiento de la nueva institución.
Ese proceso, por ley, deberá ser vigilado por la Contraloría, responsable de intervenir en los procesos de entrega-recepción por inicio o conclusión de encargo de los servidores públicos del IFE; verificar y auditar el uso de recursos del instituto, así como verificar los controles administrativos para proteger su patrimonio.
Por eso, planteó Edmundo Jacobo Molina, “la Cámara de Diputados tendría que sacar una convocatoria, para ya sea ratificar al contralor o nombrar uno nuevo, porque cabe la posibilidad de que el contralor pueda ser reelecto.
“Pero además aquí hay un problema legal que resolver; tiene la Cámara que nombrar a un contralor para la nueva institución y eso dependerá de la fecha en que se constituya la nueva institución.
Expuso que cualquier decisión que se tome debe evitar “una laguna legal sobre quién es el contralor de la institución, porque eso no sería conveniente para nadie”.
Para el exconsejero electoral y constitucionalista Jaime Cárdenas Gracia, éste es uno de los asuntos más delicados, desde el punto de vista administrativo, que deberá enfrentar el nacimiento del INE.- (El Universal)