México (24 de enero).-

Debido a la serie Breaking Bad, Bryan Cranston descuido su trabajo en el cine, pero ahora regresa dispuesto a retomarlo por completo.

El actor californiano, de 59 años, famoso por su personaje del químico Walter White en la ya concluida emisión, comentó en la presentación de su nuevo filme, Trumbo, que le dio su primera candidatura al Óscar como Mejor Actor, que en algún momento la popularidad lo desubicó.

“Hice poco cine como protagónico durante los años que duró Breaking Bad, y sentí que perdí el timing, el placentero momento de disfrutar una película. Se me olvidó que hacía un filme y había que esperar meses para saber cómo funcionaba con el público.

“La televisión me quitó mucho tiempo y ahora que volví al set de lleno, me sentía un novato. Eso me refrescó. Me vi ante Helen Mirren como un aprendiz porque ella sí que tenía todo el dominio del ‘mood’ cinematográfico, y ya me voy encarrilando de nuevo”, dijo Cranston.

La serie, transmitida de 2008 a 2013, y que le dio un Globo de Oro y cinco Emmys, lo catapultó en países como China, India y Rusia, y lo obligó a replantearse qué era lo que quería lograr en su carrera.

“El gran reconocimiento viene a mi carrera ya en mis años 50, y eso me hace creer en los tiempos exactos. Ya tengo más experiencia, conocimiento, no sé si decir sabiduría, pero aprecio mucho más cada línea, cada argumento, cada día en el set.

“Viví tan de prisa en la televisión que el cine me hizo repensar y repensar en las pausas que debía tomar. Yo, hoy en día, creo que todo llega a su momento y no hay nada de más en la vida de una persona. Todo sucede por algo”.

Cranston compitió al Globo de Oro como Mejor Actor por su papel del escritor hollywoodense Dalton Trumbo, y también aspira en el mismo rubro al BAFTA y al Screen Actors Guild Award.

“Es un estupendo papel, sin duda, una joya que cayó en mis manos y que me aferré a que fuera mío. Le dije a mi agente que tenía que hacer lo que fuera para lograrlo y me siento muy orgulloso de él.

“Es la historia de un escritor que se regodea con la élite hollywoodense hasta que es acusado de comunista en un periodo muy oscuro de la historia de la justicia norteamericana”.

Aclara que no dejará la pantalla chica, aunque su prioridad será el cine, pues para este año prestará su voz para la nueva película de Wes Anderson (aún sin título) y para Kung Fu Panda 3, además de que tiene otros cinco largometrajes por concluir y uno más para televisión.

“Es curioso lo que te da el cine y lo que te da la tele. El cine te lleva a un mundo paralelo de retroalimentación con el público mientras dura la película en cartelera. Luego, pocos se acuerdan.

“En la tele, las repeticiones generan una presencia constante, y por ejemplo, en México sé que Malcom in The Middle es un programa que se sigue repitiendo y los niños y jóvenes me conocen por el papel de Hal que hice ahí, y de eso hace diez años ya”.