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1. De campanazo en campanazo. Aún dentro del PAN, en su partido, había un notorio escepticismo. Hace unos 6 meses nadie apostaba por él. Joaquín Díaz Mena estaba enfilado a competir por el Senado, con muy buenas posibilidades de ser postulado para ese cargo por sus compañeros albiazules, pero nadie lo veía como gobernador. Pero se dieron una serie de circunstancias que, inesperadamente, le hicieron optar por intentar ser candidato a gobernar Yucatán y lo logró: en sorpresivo resultado, consiguió ganar la contienda a Sofía Castro Romero, precandidata con más recursos económicos y que había empezado antes su "precampaña" compitiendo originalmente con otra mujer: Beatriz Zavala, quien finalmente prefirió desplazarse a la contienda por la alcaldía de Mérida. Contra todo pronóstico, Díaz Mena le ganó las internas panistas a la señora Castro Romero.
2. Goliat y Joaquín. Así se veía de gigante Rolando Zapata Bello comparado con Huachito, al iniciar este año electoral. Joaquín además era poco conocido en Mérida y contó con pocos recursos económicos durante los meses precedentes al 1o de julio de 2012. "No le va a dar tiempo de darse a conocer", se decía. En la víspera de la elección, Díaz Mena ha ido haciendo en primer lugar una extraordinaria campaña en cada municipio del interior del estado, haciendo además gala de una efectiva capacidad negociadora, al obtener sorpresivos amarres con los descontentos de los procesos internos del PRI. Tradicionalmente el PRI tiene su reserva de votos en los municipios rurales. En esta ocasión, algunos analistas que han seguido el desempeño de los candidatos, pronostican que inesperadamente el PAN podría ganar una cifra récord de municipios en el interior de Yucatán. ¿Quién lo iba a decir hace apenas unos meses?
3. Mérida. Y como elemento final, en Mérida el rival de Rolando obtuvo consistentes avances en cada uno de los debates o encuentros entre los candidatos: uno a uno, en las universidades, en los foros empresariales y en el único debate televisado -para "suerte" de Zapata Bello- Díaz Mena, a juicio de los asistentes, resultó superior, con mejores argumentos y más convincente oratoria. Nadie hubiera pensado que para finales de junio se empezara a hablar en círculos cada vez más amplios de una eventual victoria del tal Huachito de San Felipe.
4. La piedrita en el Zapata. El análisis estaría incompleto si no se revisara el desempeño de quien empezó como puntero y que al día de hoy parece ir ligeramente a la zaga. La campaña de Zapata Bello ha sido la más costosa promoción política en Yuacatán de todos los tiempos. Nunca se había visto tal despliegue de recursos. Y más ahora que el tracking -la encuesta verdadera que tiene el PRI, a la que sólo tiene acceso un círculo muy reducido de la directiva priísta- muestra que hace aproximadamente 15 días Díaz Mena alcanzó e inició el rebase, según ese mismo estudio encargado por la dirigencia del PRI. A raíz de eso se ha recrudecido por parte de la ola roja el reparto de despensas, material de construcción y de dinero en efectivo, todo ello en pueblos y en las colonias más marginadas de Mérida. La de Rolando ha sido una campaña fría, monótona y plana, eso sí, con inacabables recursos. Tan es así que tuvo que sacarse de la manga una edición yucateca de la encuesta de Consulta Mitofsky que no estaba presupuestada para Yucatán y que le dio en días pasados una increíble "ventaja" de más de 20 puntos al tricolor. "Se les pasó el cuchareo en la encuesta", me comentó un empresario.
5. Rolo MacPato. Increíblemente, en zonas empobrecidas de Yucatán y en un sinnúmero de barrios de escasos recursos de Mérida, el equipo y los delegados de Zapata Bello "pagan" hasta 2 ó 3 mil pesos por votante comprometido con los 4 a 6 billetes de quinientos pesos. De ese tamaño es el miedo a Huachito, el miedo también a los ciudadanos de Yucatán, a quienes se les ve decididos a castigar con su voto al saqueo inmenso e incuantificable que sufrió Yucatán en estos 5 años del ivonato. ¿Cuántos sucumbirán a la despensa, a las láminas de cartón, a los pollitos y a los 4 o 6 quinientones asentados cash? Esa es la pregunta cuya respuesta tendremos al iniciar la semana que inicia el lunes dos de julio.
6. El río de dinero. Y otras preguntas obligadas son: ¿de dónde sale tanto billete? ¿Se estará vendiendo la elección al narco? ¿Es el talkú que se generó con tanto latrocinio en Yucatán en los últimos 5 años con empresas fantasmas y otros métodos de la ola roja? ¿Es un guardado de lo que obtuvieron con sus operaciones y empresas fantasmas Angélica Araujo, Jorge Esma Bazán, Alejandro Menéndez Bojórquez, Friedman el de la Procu, Panchito Torres el de Obras Públicas, y los interminables etcéteras de un latrocinio incuantificable y nunca antes visto en el legendario Mayab? Hasta el mítico Cervera Pacheco tenía lo que se le llama "la ética de la mafia" que implica robar sin escándalo: "hazlo pero con disimulo y sin descaro", máxima que el equipo de su sobrina Ivonne Ortega Pacheco ha exhibido ignorar, de manera tan impune como escandalosa.
7. Si no se pudo a "la buena", ahora a la mala. Se dice que integrantes de las bandas "neighborhood, 5 locos y sureños", fueron contratados por el PRI para ir a robar casillas por medio de grupos de 50 pelafustanes a ciertos lugares, entre ellos Abalá, Chemax, Conkal, Dzununcan, Seyé, Pisté, Dzityá, Tamanché y Tecoh. De tal suerte, los habitantes de esas localidades han decidido estar atentos y organizarse para rechazar y repeler a los mapaches. Cabe mencionar que los vecinos dijeron no confiar en la policía estatal, pues lo más seguro es que ésta tenga órdenes de proteger a los delincuentes electorales. Lo anterior, pese a que a los integrantes de "las fuerzas del orden" les fueron retiradas sus credenciales del IFE. Muchos dicen que la gente no se va a dejar intimidar. En tanto, en los cuatro puntos cardinales de la ciudad y el estado, el PRI continúa frenéticamente su ritmo de reparto de vasos, camisetas, despensas, láminas y dinero, llegando al extremo de pagar hasta siete mil pesotes por la "lealtad" de representantes de casilla, sin importar su extracción partidista. Lo bueno es que para los tricolores esta sería una campaña austera y tranquila...