978 palabras
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de agosto.- El presidente Felipe Calderón asistió ayer a las XXXIII Sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, instancia central para el cumplimiento efectivo de una función primaria del Estado Mexicano: garantizar el orden y la seguridad.
Durante su discurso, el Presidente comentó que al iniciar su gobierno encontró un deterioro de las condiciones de seguridad en el país, resultado de una combinación de factores a nivel nacional y una dinámica global nueva, la cual formó por décadas el caldo de cultivo para la proliferación de la delincuencia. Señaló que las organizaciones criminales pasaron de un modelo de narcotráfico, enfocado en el control de rutas de trasiego a EE. UU., a un modelo de narcomenudeo. La expansión súbita del crimen tomó por sorpresa a instituciones de seguridad y justicia obsoletas. México padecía las consecuencias de un modelo de seguridad que terminó por ser inoperante y propiciatorio de la corrupción.
El Presidente Calderón dijo que durante su administración se ha empeñado en transformar a México es un país moderno, competitivo y más seguro. 'Por eso le hemos metido tanta canilla, como dicen ustedes, al tema de la seguridad', expresó el Mandatario tras inaugurar en Ensenada el tramo carretero Tecate-El Sauzal.
“Ante esa crítica situación y sin instituciones de seguridad capaces de hacer frente a ese nuevo fenómeno delincuencial, era una obligación ética, política y constitucional del Ejecutivo Federal cumplir y hacer cumplir la ley en defensa de los ciudadanos”, señaló el Presidente.
Para ello, el Gobierno Federal diseñó una estrategia integral sustentada en tres ejes de acción: enfrentar a todas las organizaciones criminales; reconstruir las instituciones encargadas de la seguridad y fortalecer el tejido social, la cultura de la legalidad y la participación ciudadana. Sobre estos ejes se han concretado logros fundamentales y se han construido acuerdos de gran relevancia nacional.
Respecto al primer eje, el Primer Mandatario reconoció a las Fuerzas Armadas y a la Policía Federal por su lealtad, eficacia y profesionalismo en la desarticulación de las estructuras de la delincuencia en todo el país. Hasta hoy, han sido capturados, o abatidos en su captura, 22 de los 37 líderes criminales más peligrosos que operaban en México.
Destacó además que la incidencia de los homicidios dolosos a nivel nacional ha mostrado un decremento del 7 por ciento en el primer semestre de este año, respecto al primer semestre del año pasado. Y en el caso de homicidios presuntamente atribuibles a rivalidad delincuencial, la baja de homicidios es ya cercana al 15 por ciento.
En cuanto al segundo eje, referente a la reconstrucción y restructuración de las instituciones de seguridad y justicia, hoy México cuenta con reformas de gran calado como la del Sistema de Justicia Penal y la Reforma al Sistema Policial. El Presidente reiteró que es imperativo acelerar el paso para dar plena viabilidad operativa al nuevo Sistema Penal Acusatorio en todos los estados.
México cuenta con infraestructura y sistemas tecnológicos de última generación para la recopilación, sistematización y consulta de información estratégica aplicada a la seguridad pública. Esta infraestructura tecnológica, prácticamente nueva en el país, está integrada por “Plataforma México”, y ya permite a las instituciones de seguridad generar y explotar productos de inteligencia con alcance nacional. El Gobierno Federal diseñó y puso en marcha un nuevo modelo de policía que ofrece las bases para un servicio civil de carrera a nivel federal, sustentado en procesos objetivos y criterios basados en mérito para la profesionalización de los cuerpos policiales del país, el Presidente señaló que el camino hacia un país más seguro es “la consolidación de policías y ministerios públicos profesionales y confiables”. Al mes de julio de este año, el 100 por ciento de los elementos adscritos a instituciones federales fueron evaluados con controles de confianza. A nivel estatal y municipal, se contó con un avance global de evaluaciones de alrededor del 45 por ciento.
Sobre el tercer eje, el fortalecimiento del tejido social, el Presidente comentó que se ha dado un fuerte impulso a la apertura de más y mejores oportunidades de educación y empleo, además de la implementación de acciones en materia de prevención y tratamiento de adicciones. Las acciones se han realizado a través de becas y programas como Escuela Segura, Rescate de Espacios Públicos o Nueva Vida. Aseguró que fortalecer la vertiente preventiva es una premisa fundamental para ganar la lucha por la seguridad.
De la misma manera, el Primer Mandatario reconoció ampliamente la valiosa labor que han realizado los representantes de organizaciones civiles, quienes desempeñan una tarea de vigilancia social central para concretar los avances de los que hoy dan cuenta.
Para finalizar, el Presidente enfatizó que todos los esfuerzos realizados en la lucha por un México más seguro tienen como razón de ser a las víctimas del delito. Se ha actuado siempre con un sentido de urgencia para impedir que más ciudadanos sean víctimas de la delincuencia.
Asimismo comentó que el Gobierno Federal ha impulsado la instauración de una auténtica política de Estado en materia de seguridad, sustentada en nuevas capacidades institucionales a nivel nacional y en un estrecho vínculo con la sociedad.