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Wendy Wright nos cuenta sobre el feliz hecho de que Estados Unidos ha bloqueado un intento furtivo de aprobar un tratado de la ONU que tememos que sea usado para promover el derecho al aborto. La lucha no ha terminado, pero ha sido suspendida por ahora.
Un intento sorpresa de aprobar el tratado de la ONU sobre las personas con discapacidad en el Senado estadounidense el pasado jueves se frustró cuando el senador Mike Lee anunció que él y otros treinta y seis senadores se oponen a aprobar cualquier tratado en este momento. Los treinta y siete senadores son suficientes para bloquear acuerdos.
Varios senadores anticiparon que se harían aprobar medidas polémicas como los tratados de la ONU en una sesión de final de mandato entre las elecciones estadounidenses de noviembre y cuando se reúna el nuevo Congreso, en enero. El jueves a la mañana, los senadores Mike Lee y Pat Toomey hicieron circular una carta para que sus colegas la firmaran, que decía: Los redactores de la Constitución claramente creyeron que todos los tratados presentados ante el Senado deberían ser sometidos a un análisis altamente minucioso antes de ser acordados.
El jueves a la mañana, con solo unas cuantas personas en el recinto, el senador Dick Durban intentó que el tratado sobre discapacidad fuera aprobado unánimemente. El senador Lee respondió: Si es cierto que proponer un tratado durante el final de un mandato es demasiado apresurado, entonces también es cierto que es demasiado apresurado hacerlo ahora.
Tanto quienes lo apoyan como quienes lo rechazan coinciden en que el tratado no mejora las leyes estadounidenses vigentes. Algunos discapacitados lo ven como un paso más para ser aceptados y consideran la oposición como una ofensa personal.
Otros temen que este acuerdo que fue pensado para integrar a las personas con discapacidad en las comunidades pueda excluir a los niños por nacer (particularmente a quienes tienen alguna discapacidad) al permitir el aborto.
Siempre tengo dudas cuando veo que se promueve la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad como una cosa maravillosa en la comunidad de discapacitados, dijo a Friday Fax el presidente de un organismo destinado a ese grupo. Como persona que tiene una discapacidad y como persona que cree en el valor de toda vida, quiero leyes y tratados que respeten cada etapa de la vida humana, incluso la vida de las personas con discapacidad y la vida de aquellos que nacerán con una discapacidad.
El lobby más fuerte es el de agrupaciones de veteranos. Ellos sostienen que el tratado ayudará a los veteranos estadounidenses discapacitados que viajan en otros países, a pesar de que la ratificación de Estados Unidos no origina derechos para los estadounidenses cuando salen del país.
Mi esperanza es que la ratificación de Estados Unidos tenga un impacto moral en otras naciones, dijo el senador Tom Harkin. Los críticos observan, no obstante, que los tratados de la ONU tienen una triste trayectoria en la mejora de los derechos humanos.
¿Porqué Alemania y Suecia prohíben la escolarización en el hogar y persiguen y hostigan a los padres que la practican a pesar de haber ratificado tratados de derechos humanos que aseguran que los derechos de los padres de elegir alternativas a la educación pública son anteriores a los reclamos del Estado? preguntó Michael Farris de la Home School Legal Defense Association. Él declaró en contra del tratado sobre discapacidad en una audiencia del Senado, en julio.
Este tratado promueve la idea de que el gobierno, no los padres, tienen la última palabra en las decisiones concernientes a sus hijos, señaló.
Además de lo relacionado con los derechos de los padres y con el aborto, el senador Lee teme que el acuerdo amenace la soberanía al someter a los países a comités de la ONU deshonestos y que trate los beneficios económicos, sociales y culturales como derechos, sentando un precedente que permita a los comités internacionales definir la legislación estadounidense.