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Lunes 3 de diciembre.- Es la nueva moda estadounidense. Los tacones son la perdición de muchas mujeres, que al final sufren las consecuencias de estar 10 centímetros más altas y presumir de unas piernas estilizadas. Cortarse el dedo meñique es la solución que en Estados Unidos están llevando a cabo para no dejarse vencer por el dolor de los zapatos. Otra tendencia asidua en el país es inyectarse colágeno en la planta de los pies. De esta manera los tacones de vértigo no pasan a un segundo plano en el armario de las más coquetas.
Desde el sector médico consideran que esta nueva tendencia supone un peligro para la mujer y posibles futuras deformaciones. Un miembro de la Asociación Americana de Podología Médica, el doctor Brenner, afirma en CBSNews que "yo sólo hago cirugías para las personas que tienen dolor. Si no es así, usted no tiene cirugía", declaraciones de las que medios online se hacen eco.
Sin embargo la opinión de algunas mujeres está clara. Susan Deming asegura a Fox News, “a menos que hayas estado allí, no puedas encontrar zapatos, y sientas mucho dolor, no puedes juzgarnos".
"Yo tenía callos y todo tipo de problemas con mi pie izquierdo. Y finalmente, ha sido una solución”. (VANGUARDIA)