487 palabras
Siria (30 de mayo).- “Refugiadas sirias para casarse”. Así se llama la página de la red social que hace de enlace entre hombres y mujeres que huyen de la guerra contra la dictadura de Bashar al Assad. Su éxito ha sido tal que sumó más de 15.000 me gusta en sólo cinco días.
La página fue retirada luego de una campaña en las redes sociales, aunque Facebook ha aclarado que no había nada en ella que vulnerara los códigos de la compañía.
“Divorciada, 26 años, de Siria, musulmana con velo, que reside en Egipto”, decía uno de los anuncios. Según la publicación, la mujer es “infeliz en la casa en la que vive”, y busca a alguien “honesto y serio” que se haga responsable de ella y su hijo.
La página no ofrecía ninguna información suplementaria y tampoco respondía a los mensajes. Pero las dudas sobre su origen no ocultan que el tráfico de refugiadas sirias ha crecido desde el inicio del conflicto sirio en marzo de 2011.
Otras páginas similares, que han sobrevivido a los reclamos, muestran a chicas jóvenes sirias posando en los campos organizados por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Pero no sólo internet sirve para ofrecer en matrimonio a las mujeres sirias. Alrededor de los campos de refugiados, que solo en Líbano alojan a un millón de personas, se ha organizado una red informal de intermediarios que las ofrecen a los interesados. Los “clientes” van desde acaudalados árabes hasta turistas extranjeros que piden por “menores de 16 ó 17 años.
Muchos de los encuentros son “enlaces temporales”, una figura permitida por el islam que prevé una fecha de caducidad, concertada, al casamiento. Para muchos, este tipo de encuentros no son más que una forma oculta de prostitución.
Por otro lado están los matrimonios concertados, una tradición que siempre ha existido en Siria, así como los enlaces con mejores de edad. La diferencia es que antes de la guerra se hacían entre familias de un mismo pueblo, cercanas entre sí, previo acuerdo del pago de una dote.
“Hay una gran diferencia cuando estos matrimonios tienen su punto de partida en intermediarios como es el caso de la página de Facebook” explica Lama Fakih, de Human Rigth Watch. Como aquí interviene el dinero, la mujer se convierte en una mercancía víctima de tráfico.
ACNUR cifra en 3 millones los refugiados sirios bajo su protección, de los cuales, el 80% son mujeres y menores de edad.- (Infobae)