165 palabras
A Guillo
Una naricita de oso,
llena de frío,
en los brazos de papi
buscaba abrigo
- Se congelan mis manos
Y mis piecitos,
tú eres un oso grande,
abrázame y caliéntame papito…
Papá oso abrió los brazos
y contra su pecho,
puso a su hijo,
lo estrechó muy fuerte,
le plantó dos besos
en los cachetes;
y con cariño,
así le dijo:
Duerme mi bien,
aquí abrazado tendrás cobijo
y en un instante podrás soñar
y hasta jugar
con los angelitos,
duerme mientras te arrullo,
vuela veloz
al país del calor
y el sol,
mi pequeñito…
Papá oso de pronto,
escuchó ronquidos rítmicos y suaves
como suspiros
Y supo que bebe oso
Se había dormido…