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LA PAZ, Bolivia, 1 de mayo.- El principal programa actual en Bolivia de la agencia de cooperación estadounidense USAID, cuya expulsión del país anunció hoy el presidente Evo Morales, se enmarca en el área de la salud, con una inversión de 20 millones de dólares en tres años, informaron a EFE fuentes de la Embajada de EE.UU.
Las mismas fuentes indicaron que será el Departamento de Estado estadounidense, desde Washington, quien se pronuncie inicialmente sobre la decisión del Gobierno boliviano, que este miércoles decidió expulsar de su territorio a la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) bajo acusaciones de conspiración.
Indicaron, asimismo, que desde que el Gobierno boliviano puso en marcha su Plan Nacional de Desarrollo en el año 2008, todos los programas de USAID han sido enmarcados en ese contexto.
El principal programa actual en Bolivia de la USAID, se enmarca en el área de la salud, con una inversión de 20 millones de dólares en tres años.
Con la decisión de expulsar a la cooperación estadounidense, que sorprendió a los bolivianos debido a que cada 1 de mayo lo que anuncia el Gobierno es la nacionalización de alguna empresa de sectores estratégicos, Morales lleva a la práctica una amenaza que lleva esgrimiendo desde el año 2009.
De hecho, ya en ese año fue expulsado de Bolivia el Programa de Fortalecimiento de la Democracia de la USAID bajo la acusación de financiar a organizaciones no gubernamentales que conspiraban contra el Gobierno de Morales, recordaron las fuentes.
Con la decisión de expulsar a la cooperación estadounidense, Morales lleva a la práctica una advertencia que lleva esgrimiendo desde el año 2009.
Un año antes, el mandatario expulsó al embajador Philip Goldberg y a la agencia antidrogas estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés), acusándolos de conspirar en su contra, y hasta la fecha los dos países no mantienen relación a nivel de embajadores.
Además, en julio del 2010 los alcaldes de la región boliviana de Pando también expulsaron a esta agencia estadounidense de su territorio por supuestas intromisiones políticas.
La cooperación estadounidense trabaja en Bolivia desde 1964 con programas centrados en las áreas de salud y manejo sostenible de recursos naturales, entre otros.
Cuando Morales llegó al poder en el 2006, USAID destinaba anualmente a Bolivia unos 40 millones de dólares para programas de salud, medio ambiente y desarrollo económico, casi la mitad de ellos para las zonas de Los Yungas, en La Paz, y el Chapare, en Cochabamba, ambas productoras de hoja de coca, base para producir cocaína.
El último país en expulsar de su territorio a la cooperación de los Estados Unidos fue Rusia, en septiembre del año pasado. (Opinión)