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TIJUANA, Baja California, 20 de agosto.- Aarón Pino, el joven que hizo pública la foto de una perra de raza Chihuahua clavada en una cruz, dio su versión de los hechos y pidió una disculpa pública por lo que reconoció, fue un error.
Al acudir a la redacción de El Mexicano, afirmó que está dando la cara, pues además de que está consciente de que no debió publicar la foto, le preocupan las decenas de amenazas que ha recibido en las últimas horas.
Incluso reveló que tuvo que cerrar su cuenta de Facebook, a través de la cual había publicado la cruda imagen el día de ayer.
Explicó que cerca de un río en Tecate encontró la perrita clavada en una cruz, la cual estaba en posición vertical. Aunque llamaba la atención de los transeúntes nadie la retiró, pero él y su novia decidieron enterrarla.
Fue en ese momento en que quiso mostrar su hallazgo y subió la fotografía a las redes sociales, lo que reconoce fue un grave error, pues ahora es calificado como agresor de animales.
Reiteró que pide una disculpa pública e insistió en que no maltrata animales, incluso en el rancho de su familia está encargado de cuidarlos y alimentarlos.
Un joven identificado como Aarón Pino subió a su cuenta de Facebook una foto en la que posa con un perro crucificado ya muerto. La imagen fue denunciada a través de las redes sociales, se volvió viral y generó ira e indignación entre los cibernautas.
La foto muestra a dicho usuario junto a una perrita a la que le fueron clavadas sus patitas en la madera en forma de cruz. El hecho sucedió en Tecate, Baja California.
A través de su cuenta de Facebook, Aarón Pino aseguró que él no crucificó a la mascota, detalló que sólo se la encontró y reconoce que fue un error tomarse la foto. Cabe mencionar que su cuenta ya fue desactivada.
La Ley de Protección a los animales domésticos del Estado de Baja California establece que las sanciones por maltrato son: una advertencia, una multa dependiendo del tipo de maltrato y un arresto de hasta 36 horas. (El Mexicano/Milenio)