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MOSCÚ, 7 de mayo.- Una multitudinaria protesta convocada ayer por la oposición en vísperas de la pomposa ceremonia de asunción de Vladimir Putin como presidente de Rusia derivó ayer en violentos choques con las fuerzas antidisturbios que dejaron más de 400 detenidos.
Por lo menos seis personas terminaron hospitalizadas después de la "Marcha de millones", como se denominaron las manifestaciones convocadas por toda Rusia para protestar por la investidura de Putin.
Miles de agentes antidisturbios se habían desplegado para impedir a los manifestantes cruzar un puente. Esto disparó los choques y fue cuando los agentes intervinieron con una lluvia de porrazos. El sábado, la Policía afirmó que desplegaría 14,000 hombres.
La policía, formando una línea para evitar que una parte de la marcha avanzara a un puente que cruza el río Moscú hacia la sede de gobierno, golpeó a varios manifestantes en la cabeza. El grupo se defendió con las pancartas que portaban, al grito de "No nos iremos" y "Vergüenza".
"Más de 400 personas fueron detenidas en el centro de Moscú por actos contrarios a la ley, desorden público y desacato a las fuerzas del orden. Además, otros 40 nacionalistas fueron detenidos por un altercado en el metro y por provocar a la policía", dijo el vocero del Ministerio de Interior ruso a la agencia Interfax.
Entre los detenidos había varios líderes opositores, como el dirigente del Frente de Izquierda, Serguéi Udaltsov, el liberal Boris Nemtsov y el bloguero Alexei Navalni.
Los líderes de la marcha pidieron a los manifestantes que permanecieran en vigilia hasta hoy en la plaza Bolotnaya, cerca del Kremlin, para rechazar una vez más la asunción de Putin, coronando un ciclo de numerosas protestas en los últimos meses a raíz de las denuncias de fraude en los comicios legislativos de diciembre en los que se impuso el partido del premier, Rusia Unida.
Putin al asumir hoy lunes la jefatura del Estado. Podría permanecer en el poder hasta 2024 gracias a una reforma constitucional que aumentó de cuatro a seis años los mandatos presidenciales.
La manifestación de ayer fue autorizada hasta un máximo de 5000 personas, pero antes del inicio de la marcha el número ya era superior. La policía estimó en 8000 los participantes, cifra que se eleva a 100,000 en los informes de la oposición y que otras fuentes estimaron en 50,000.
La bandera del Frente de Izquierda que conducía Udaltsov encabezó la movilización con frases como "Rusia sin Putin" y "Putin nuevo zar".
Los manifestantes lanzaron piedras y botellas de agua. Unos 20 policías quedaron heridos y tres fueron hospitalizados, añadió un alto funcionario del ministerio del Interior.
Un hombre murió ayer al caer desde un sexto piso en la calle Bolshaya Yakímanka, en el centro de Moscú, cuando intentaba fotografiar la marcha de protesta.
Las autoridades, que calificaron los incidentes de "provocación" por parte de los organizadores de la marcha, señalaron que algunos manifestantes lanzaron piedras y botellas contra la policía y también contra algunos periodistas.
Según la policía, algunos exaltados atacaron a dos periodistas del canal de televisión NTV, que en días previos a las elecciones presidenciales de marzo emitió un reportaje en el que acusaba de mentiras y manipulaciones a la oposición. (EFE)