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WASHINGTON D.C., 5 de mayo.- Cuando faltan seis meses para las elecciones en Estados Unidos, el presidente Barack Obama inició ayer su campaña en Ohio en busca de la reelección, con un combativo discurso que se centró en los logros obtenidos durante su mandato.
Acompañado por su esposa Michelle Obama, el presidente norteamericano destacó, frente a un auditorio colmado, los esfuerzos de su gobierno para salvar la economía norteamericana e hizo hincapié en la muerte del ex líder de Al-Qaeda, Osama bin Laden, uno de los mayores hitos de su gobierno.
"No estamos aquí sólo para ganar una reelección, estamos aquí juntos para continuar construyendo esos Estados Unidos en los que creemos, y lograr fortalecer su clase media", dijo el presidente.
Obama, cuyo nuevo lema de campaña es "Adelante", advirtió que los comicios de noviembre serán más ajustados que los que lo llevaron a la presidencia en 2008, pero dijo que vencerá al precandidato republicano Mitt Romney, favorito en la contienda interna de su partido.
"En este país, la gente prospera cuando tiene una oportunidad. Cuando recibe una educación, cuando pueden desarrollar sus habilidades. Y ésta es la única manera para lograr que Estados Unidos sea más fuerte", insistió Obama, que está centrando su política en facilitar el acceso a los créditos universitarios para los estudiantes.
Luego de Ohio, uno de los estados más decisivos en términos electorales, el presidente se dirigió a Richmond, la capital de Virginia, territorio tradicionalmente republicano pero que votó por Obama en 2008.
En su primer discurso, ha criticado el perfil de alto ejecutivo del presumible rival republicano, el exgobernador de Massachusetts Mitt Romney. En la comparecencia realizada en la Universidad de Ohio que se verá precedida por más actos electorales en el estado de Virginia, Obama ha preconizado los progresos cosechados durante su mandato y ha mandado varios mensajes al electorado más joven, clave en los comicios de 2008.
Obama ha focalizado gran parte de su discurso en recriminar a Romney su perfil de alto ejecutivo, alejado de lo que verdaderamente preocupa a los ciudadanos estadounidenses y, en especial, a la clase media, el otro granero de votos fundamental en su victoria de 2008. "No me importa todas las formas en las que intentas explicarlo", ha retado Obama, "pero las empresas no son personas. El pueblo son personas".
El Mandatario advirtió que los comicios de noviembre serán más ajustados que los que le llevaron a la Presidencia en 2008, pero aseguró que ganaría al precandidato republicano Mitt Romney, favorito en la contienda interna de su partido, mediante el llamado "puerta por puerta" en cada rincón del país.
El presidente de Estados Unidos ha asegurado que el Partido Republicano abogará por reducir los impuestos a las clases más pudientes, recortar en Sanidad y Educación, y "otorgar a los bancos y a las aseguradoras aún más poder". "Los republicanos en el Congreso han encontrado a un candidato presidencial que ha prometido imponer su agenda en cuanto tenga la ocasión de hacerlo", ha apostillado.
Por otra parte, Obama ha defendido su gestión económica. "Hemos de llevar a cabo más esfuerzos sostenidos y continuados, tanto por mi parte como por la vuestra, para que Estados Unidos se recupere completamente", ha admitido ante unas 14.000 personas que, sin embargo, no han llenado el estadio de la Universidad de Ohio. Asimsimo, ha celebrado que el difunto líder de la organización terrorista Al Qaeda, Usama bin Laden, ya no sea una amenaza para Estados Unidos. "Al Qaedá está a punto de ser derrotada y la guerra de Afganistán se habrá acabado en 2014", ha vaticinado Obama, que ha acusado a Romney de lamentar el fin del conflicto bélico en Irak con la retirada de las tropas a finales del año pasado.
La esposa del presidente, Michelle Obama, ha hablado al comienzo del mitin, interrumpida en ocasiones por proclamas que pedían "cuatro años más", sobre las claras diferencias en la biografía de Barack Obama y de Mitt Romney. En su breve alocución, Michelle ha recalcado que "Barack sabe lo que significa cuando una familia está luchando, cuando alguien todavía no ha alcanzado su potencial".
Más allá del discurso de los Obama, en el primer acto de campaña del presidente, los miembros de su equipo han portado iPads y móviles con los que han contabilizado los asistentes y han recabado sus datos, según ha recogido el diario norteamericano 'The Washington Post'. Las nuevas tecnologías han copado un papel protagonista en el mitin, en el que una gran pantalla situada a las espaldas de los ponentes ha recogido los comentarios y las fotos que iban colgando los seguidores de Obama en las redes sociales de Twitter y Facebook. "Está muy bien", ha dicho el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, al respecto. "Los mensajes de nuestros seguidores de todo el país se verán en una gran pantalla en directo durante el acto", ha agregado en un correo electrónico enviado a todos sus simpatizantes.
Como respuesta, la portavoz de Romney, Andrea Saul, ha reprochado en un comunicado "los majestuosos actos de campaña" de Obama cuando "las familias estadounidenses continúan luchando a contrarreloj para pagar sus facturas, encontrar un trabajo y salvaguardar sus hogares".
"Aunque el presidente Obama ignore todas las estadísticas sobre sus tres años y medio al mando, el pueblo estadounidense no lo hará. Este noviembre le hará rendir cuentas por sus promesas incumplidas y sus liderazgo ineficaz", alega Saul en el documento. (EFE / EP)