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LOS ÁNGELES, 13 de febrero.- Christopher Dorner, el ex policía de Los Angeles objeto de una incesante persecución desde la semana pasada, aparentemente murió este martes luego de un tiroteo en una cabaña en las montañas de San Bernandino, en la zona de Big Bear, California.
Un cadáver carbonizado, aparentemente el de Christopher Dorner, fue encontrado dentro de la cabaña que se quemó luego de que la policía lanzó bombas de gas lacrimógeno a su interior. La policía indicó que la identificación del cadáver podría demorar varias semanas.
Carbonizado Christopher Dorner (aunque su cadáver permanece sin identificar), se acabó la cacería humana más grande en la historia de California.
En lo que fue el principio del fin de la cacería humana más grande en la historia de California, un agente murió y otro resultó herido tras intercambiar disparos con el fugitivo en una zona cerca del Lago Big Bear, a unos 160 kilómetros al norte de Los Angeles, dijeron las autoridades.
El tiroteo se produjo después de que éste entró a una vivienda, maniató a dos personas y les robó su vehículo.
La policía acordonó la zona, la cabaña se incendió y después fue hallado un cadáver calcinado.
Se informó que un ayudante del sheriff del condado de San Bernardino falleció tras verse envuelto en un tiroteo en la zona montañosa de Big Bear (California) mientras participaba en la búsqueda de Dorner.
Pesaba sobre su cabeza una recompensa de un millón de dólares.
El lunes, la fiscalía del condado de Riverside había acusado formalmente a Dorner de un asesinato y de tres intentos de asesinato relacionados con los tiroteos del jueves pasado, cuando el prófugo emboscó a dos policías, mató a uno e hirió a otro.
La búsqueda de Dorner se centró en las montañas de San Bernardino, al noreste de Los Ángeles, donde su auto fue encontrado abandonado y quemado cerca del centro turístico de Big Bear.
La cacería humana comenzó cuando en un manifiesto publicado en su página de Facebook, Dorner aseguró que había sido injustamente despedido del departamento de Policía de Los Ángeles en 2008 y juró venganza al declarar “la guerra, no convencional y asimétrica” contra oficiales de la policía y sus familias.
El sheriff John McMahon informó del deceso del agente que había sido trasladado hasta el centro médico de la Universidad de Loma junto a su compañero de patrulla.
El miércoles pasado había sido declarado sospechoso de los asesinatos de un oficial de seguridad y su novia, la hija de un capitán de la policía retirado a quien Dorner culpa en el manifiesto de su despido.
Las autoridades reconocieron que la búsqueda de Dorner es la más extensa que se haya realizado alguna vez en el área de Los Ángeles. (Voz de América)