376 palabras
Dos estrellas y media
La productora Illumination Entertainment —que debutó en 2010 con "Mi villano favorito"— nos ofrece su segundo largometraje animado dirigido al público infantil: "Hop. Rebelde sin pascua".
El filme se basa en la tradición norteamericana de los festejos de pascua, una costumbre muy ajena a lo que en México representa la Semana Santa. Nuestros vecinos del norte la celebran consumiendo dulces y chocolates; siguiendo la usanza de contarles a los niños la leyenda del conejo de pascua que esconde golosinas en las casas. En este sentido "Hop" es una película que aprovecha estas fechas para su estreno, pero que se ha topado con la dura competencia de "Río".
Es la historia de E. B., el hijo del conejo de pascua que se rehúsa a heredar el trabajo paterno. Siguiendo su sueño —ser baterista y tocar en una banda famosa— el conejo huye a California y se topa con Fred (James Marsden). Se volverán amigos y tratarán de resolver el problema de no satisfacer las expectativas de sus padres.
"Hop" se queda bastante corta en comparación con "Mi villano favorito". Aún con mejores técnicas de animación, el filme tiene dificultades en el guión: una historia que se extiende más de la cuenta, con un desarrollo predecible, un villano sin fuerza y soluciones fáciles que perjudican el resultado final.
Pese a ello, hay gratos momentos cómicos con chistes acertadamente irónicos, como la escena del atropellamiento, el festival infantil y cuando el conejo finge ser un muñeco de peluche. Desgraciadamente, Illumination debió apostar por un proyecto que estuviera a la altura de su primera película, y no por una historia que necesitaba trabajarse más.
Lo mejor: hay escenas bien logradas en su comicidad y James Marsden que equilibra el tono del personaje con naturalidad interpretativa.
Lo peor: que no ofrezca más que buenos chistes.