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Desde un "rebote" hasta un infarto es lo que el consumo de pastillas o de suplementos para la perdida de peso puede ocasionar a quien los utiliza como un método para bajar rapidamente de peso dio a conocer la Lic. en Nutrición del Hospital "Ignacio García Téllez" del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Elizabeth Góngora Gutiérrez.
Agregó que ni siquiera los productos naturistas están alejados de generar riesgos a la salud, ya que las pastillas o los suplementos pueden contener alguna substancia a la que la persona puede resultar alérgica.
Dijo que las pastillas o suplementos para bajar de peso pueden generar situaciones más graves que un "rebote", como taquicardia; esto sucede si las personas que se automedican con esos productos padecen de la presión.
Destacó que a una persona que padece hipertensión, un producto de este tipo puede ocasionarle un infarto.
La especialista afirmó que hacer dieta por su cuenta también es peligroso porque al dejar de consumir ciertos alimentos el cuerpo se puede descompensar.
Por otra parte, destacó que una gran desventaja de esto de las pastillas o suplementos para bajar de peso es que muchas veces no están regulados.
—La gente ni siquiera sabe lo que está consumiendo
Precisó que, por lo general vienen en bolsitas o frasquitos sin etiqueta, sin el nombre del laboratorio y sin el nombre de la sustancia activa: el comprador no sabe qué está tomando.
Explicó que el principal problema de las personas que quieren bajar de peso es que quieren utilizar las dietas que leen en las revistas o que les dan conocidos o compran productos que ven en la televisión y que aseguran que reducen peso, cuando lo correcto sería ir con un nutriólogo.
—Lo peligroso de esto es que puede haber un "rebote". Las pastillas o el suplemento pueden hacer que la persona baje rapidamente de peso, pero también hacer que suba lo que bajó y, en ocasiones, que gane más peso del que tenía inicialmente.
Está, además, el problema de que este tipo de productos no tiene efectividad garantizada; la pérdida de peso no se mantiene a largo plazo. La gente no va a pasar cinco años tomando pastillas o suplementos; la gente quiere perder peso de inmediato.
Manifestó que el "rebote" se da porque no se trabaja en lo fundamental que es para la pérdida y conservación de peso a través de hábitos de alimentación correctos y de ejercicio.
La publicidad engañosa sobre los productos para bajar de peso hace que mucha gente los compre, pero el IMSS advierte sobre sus efectos negativos.
—Es lógico que si nos llenamos de pastillas o suplementos y dietas exageradamente rigurosas por un mes o dos meses, nuestro cuerpo, a manera de protección, volverá más lento el metabolismo. Entonces, cuando dejamos las pastillas y volvemos a comer lo que comíamos antes es cuando viene el rebote.
Lo mejor es una pérdida lenta de peso que no se recupere.
A una pregunta, indicó que si una persona quiere reducir de peso debe acudir al nutriólogo para que lo oriente adecuadamente en lo que debe comer.
Agregó que en una dieta correcta se puede comer prácticamente de todo, incluyendo cereal y harina, pero hay que cuidar las cantidades.
—Como nutriólogo, lo que hacemos es calcular lo que cada persona puede comer de cada cosa para ayudarlo a reducir de peso. Además, fomentamos el ejercicio y la adopción de un estilo de vida saludable.
Manifestó que en el IMSS el médico familiar puede dar a los derechohabientes un pase de consulta en nutrición para que el especialista haga una evaluación personal, ya que cada persona es diferente en gustos y necesidades.
—Pero lo más importante es ir con la mentalidad de que tienen que tener cambios en el estilo de vida y no solo el que "hay que bajar de peso porque tengo una fiestecita". Hay que buscar una reducción saludable para poder mantenerla y reducir los riesgos de enfermedades relacionadas con el sobrepeso y la obesidad, como la diabetes, hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.
Finalmente, resaltó la importancia de enseñar a los niños a comer saludable porque cuando ya se es adulto es mas difícil crear o cambiar hábitos. L.I.