MEXICO, D.F., 11 de junio.- José Manuel de la Torre tiene esta noche la obligación de hacer pesar de nueva cuenta el Azteca cuando reciba a Costa Rica, líder del hexagonal.

Luego de dos igualadas a cero ante Jamaica y Estados Unidos en casa, el entrenador de la Selección Nacional no tiene margen de error en el Coloso de Santa Úrsula; primero, porque estaría en riesgo en la calificación al Mundial, y segundo, porque sus números en dicho Estadio son los más pobres en la historia.

A partir del verano del 2010, el Azteca pareció haber perdido su fuerza; dejó de imponerle a los rivales que llegaban y veían como una misión imposible arrancarle puntos al Tri en dicho inmueble.

De acuerdo con datos recopilados por El Economista, entre 1990 y 1999 el Tricolor tuvo una productividad de 85% jugando en casa. En la siguiente década mejoró su registro y alcanzó 87 por ciento. El problema vino después de la Copa del Mundo de Sudáfrica: a partir del verano del 2010, el Azteca pareció haber perdido su fuerza; dejó de imponerle a los rivales que llegaban y veían como una misión imposible arrancar puntos de dicho inmueble.

En lo que va de la década, el equipo mexicano tiene apenas una productividad de 50%, con dolorosos resultados como lo fue la derrota ante Estados Unidos en agosto del 2012, y dos igualadas, una con Jamaica y otra más ante los estadounidenses. Justo esos dos empates tienen actualmente al Tri sufriendo, con apenas siete puntos de 15 posibles en lo que va de la eliminatoria, y con sólo tres goles en cinco partidos, sin poder marcar aún en casa tras 180 minutos.

De la Torre asegura que “hay que ver que no se juega solo”, que “los rivales cuentan” y que “la tendencia ha sido que se les encierran tanto de local como de visita”. Tras ser cuestionado sobre cómo iba a intentar superar la barrera defensiva de Costa Rica, enfatizó que con trabajo y paciencia.

“Tenemos que ser claros, tener la creatividad para abrir al rival y tener paciencia para poder abrir la defensiva”, destacó en el entrenador nacional, quien aseguró que sus delanteros “no están presionados” por la falta de contundencia.

Finalmente, a pesar de que los números dicen lo contrario, al indicar que México es tercero con siete puntos, pero con un partido más que sus compañeros en la parte alta de la tabla que también suman siete unidades, José Manuel descartó que sea urgente una victoria esta noche. “No es que sea urgente, hay necesidad de sumar en casa, eso sí, para ponernos en una buena posición”, concluyó. (Carlos Herrera Lizalde/El Economista)