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MEXICO, D.F., 10 de junio.- Aún cuando alberga a más de 20 mil científicos en el Sistema Nacional de Investigadores, la producción científica en México no alcanza a cubrir ni el 1% de lo que se realiza en el mundo, dijo el titular del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), René Asomoza Palacio.
La producción científica en México no alcanza a cubrir ni el 1% de lo que se realiza en el mundo.
Durante su conferencia magistral Un panorama de la investigación/innovación en México: prioridades y evoluciones recientes, dentro del Foro Franco-Mexicano para la Investigación y la Innovación, Asomoza refirió que, al año, los científicos mexicanos llegan a generar hasta 10 mil artículos científicos en revistas especializadas.
El investigador señaló que no se ha trabajado adecuadamente en los últimos años, situación que podría estar traduciéndose como la causa del retraso en materia científica y tecnológica que experimenta el país, y refirió que el porcentaje del PIB del país, que está destinado a la ciencia y la tecnología, se mantiene entre 0.35 y 0.47%, cifra opuesta a la que se maneja en países como Francia, en donde se destina el 2.5% de su PIB a estos menesteres.
De acuerdo con el titular del Cinvestav, Asomoza indicó que la mayoría de las investigaciones científicas publicadas se concentran en instituciones como UNAM, UAM, IPN y el propio Cinvestav, situación que podría servir para incluir a otras instituciones en el quehacer científico.
Agregó también que la generación de recursos humanos especializados tiene mucha importancia, y señaló que en el país ha aumentado el número de graduados con nivel de doctorado, ya que se generaron de 1990 al 2012, cerca de 32 mil 700 nuevos doctores.
Otro rubro en el que hizo hincapié el especialista, es en el registro de patentes en el Instituto Mexicano de Propiedad Industrial, ya que de 14 mil solicitudes presentadas en 2011, solamente mil de ellas pertenecían a creadores nacionales, y el resto pretendía proteger tecnología extranjera.
Finalmente, señaló que los investigadores del país podrían dirigirse hacia temas importantes como energía, medio ambiente, ingeniería genética, biotecnología y tecnologías de la información. (Fuente Cinvestav)