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La diputada federal panista Rosa Adriana Díaz Lizama advirtió hoy que la deuda pública de las entidades federativas, entre ellas Yucatán, podría ocasionar una crisis que asfixie las finanzas nacionales y pidió que la Cámara de Diputados revise esta situación.
Hemos sido testigos de cómo, año con año, la deuda de las entidades federativas, cuya garantía son las participaciones federales, se ha incrementado aproximadamente 15%, sostuvo la legisladora.
La deuda sub-nacional ya se duplicó con respecto al saldo observado a finales de 2000. El mayor crecimiento durante este período fue durante los recientes 18 meses (de enero de 2009 a junio de 2010) con un incremento real por encima de 26%.
Lo anterior, aseveró, implicó que el crecimiento agregado de la deuda de las entidades federativas pasara de 1.6% del producto interno bruto en 2006 a 2.1% en junio de 2010 —de alrededor de $270 mil millones.
De acuerdo con la legisladora, en Coahuila, la deuda pública se incrementó de manera considerable al pasar de $1,561.6 millones en 2009 a $7,636.7 en septiembre de 2010. De la misma forma, el monto de la deuda de Yucatán creció en más del doble en estos dos últimos años con respecto a la que tenía contratada en 2008, cuando era de $730.9 millones, llegando a 2,076.1 millones en 2009 y 1,898 millones de pesos en 2010.
Otras entidades que registraron un mayor monto de endeudamiento fueron el Distrito Federal, con $46,096.1 millones (17.6% del total); el Estado de México, con $37,356.2 (13.4% del total) y Nuevo León, con $32,288.2 millones (11.6% del total).
La situación se acrecienta año con año, porque al crecimiento de la deuda hay que añadir los compromisos inmediatos y a futuro para cubrir el gasto corriente de los gobiernos, incluido el pago de pensiones, en un entorno con una falta de generación de ingresos propios y la poca transparencia y fiscalización en el gasto, precisó.
Entre 2004 y 2009, subrayó, el gasto corriente en los estados creció a una tasa promedio anual de 5.7% y sus obligaciones financieras pasaron de representar 50.3% de sus participaciones federales en 2001 a 61% en junio de 2010.
Al mes de septiembre de 2010, el total de obligaciones financieras adquiridas por las 32 entidades federativas del país ascendió a $278,960.5 millones, superior en $14,703.7 millones reales respecto al ejercicio 2009. Es decir, se observa un crecimiento de la deuda de 5.2% en términos reales.
Estos datos hacen evidente la falta de congruencia de las autoridades hacendarias locales en el manejo de sus finanzas, ya que los gobernadores se oponen a la construcción de una reforma fiscal integral federalista, pero recurren a la deuda pública como mecanismo rápido de acceso al financiamiento a corto plazo, sin considerar las implicaciones económicas y financieras que esto trae a mediano y largo plazo.
En ese sentido, Rosa Adriana Díaz, esta tarde propuso un punto de acuerdo, que fue turnado a comisiones, para que la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados se reúna con los secretarios de finanzas de los gobiernos estatales y con funcionarios de la Secretaria de Hacienda federal a fin de revisar la situación de la deuda pública.
El objetivo de estas reuniones es contar con un diagnóstico más preciso respecto a la situación financiera de los estados y el Distrito Federal y encontrar soluciones o alternativas que permitan racionalizar el incremento de la deuda, haciendo así más eficiente y transparente el gasto público.