Los recursos federales devueltos durante la pasada administración municipal panista fueron ahorros y economías que esa Comuna logró después de realizar los proyectos en cuestión, no dinero que no se usó por no ejercerlos, como sucede con los 3.3 millones de pesos que devolvió Angélica Araujo Lara, señaló el regidor Luis Canto García.

Esos ahorros se lograron por un manejo eficiente de los recursos. Las licitaciones de las obras se hicieron correctamente, el dinero se cuidó bien, por eso sobraron remanentes que regresaron a la federación, precisó el edil.

Es notable el desesperado intento de los regidores priístas de defender a su jefa, buscando cómo achacar a otros lo que constituye su entera responsabilidad, mientras que Angélica Araujo sólo busca los reflectores, huyendo de cualquier situación que ponga en riesgo su imagen.

La devolución de recursos federales es sólo una de las puntualizaciones que los regidores panistas hemos hecho a Angélica Araujo. En las sesiones de Cabildo hemos señalado el atraso en el pago a proveedores, el aumento en el gasto corriente y los pagos dobles a estructuras paralelas de la dirección de Comunicación Social y pagos por honorarios.

Por ejemplo, en diciembre se pagó $233,331 a una empresa particular por elaborar la agenda municipal de la alcaldesa; también se hizo un pago de $145,000 a un particular por una campaña publicitaria y se gastaron $75,000 de honorarios para asesoría por campañas publicitarias del DIF municipal. Le pregunto a los regidores del PRI: ¿Qué tienen que decir al respecto?

Llama la atención que el regidor Julio Ávila Novelo busque pistas en administraciones anteriores, cuando en una sesión de Cabildo pidió vehementemente no hablar del pasado, puesto que lo único que le interesaba a los meridanos era el futuro y su nuevo gobierno.

Se equivoca Julio Ávila cuando habla de la moral de los panistas. No se trata de moral, se trata de recursos federales que pudieron ser utilizados para combatir la pobreza de los meridanos. Le pedimos a los regidores del PRI, empezando por Angélica Araujo, que no vengan a hablarnos de moral. Hablamos del dinero que es de todos.

Aplaudimos que los regidores priístas revisen las cuentas de la administración pasada. Les pedimos que del mismo modo auditen las finanzas de su jefa, con la misma vehemencia y con la misma inteligencia. Estoy seguro que encontrarán graves irregularidades, como lo hemos hecho nosotros, finalizó.