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Unos 60 estudiantes, provenientes de las comunidades mayas de San Simón, Hunucmá, Yokdzonot, Peto y Valladolid, recibieron este sábado el documento que acredita su formación en la Escuela de Agricultura Ecológica y Campesina de Maní "U Yits ka'an" (Rocío del Cielo, en maya).
Ofrenda a la cruz, depositando una piedra
Aprendí diversas formas de hacer composta, el tipo de estiércol a utilizar y otros materiales complementarios que nos permiten obtener un buen abono, compartió, emocionado, uno de los egresados.
A mí me gustó la lombricultura, sobre todo porque he visto los resultados en mi solar. El abono que obtuve de las lombrices lo apliqué a mis rosales y otras plantas que tengo -terció otro egresado- ¡Si vieras qué plantas y flores obtuve!, exclamó alborozado.
Nunca pensé cosechar más de cien pepinos en una superficie tan pequeña. Claro, usando abonos y espalderas, sí es posible, señaló otro joven.
Los estudiantes coincidieron en que con sus nuevos conocimientos, les quedó claro que no hay motivos para ver como enemigos a las plagas, sino hay que aprender a convivir con ellas: Cuando utilizamos algún tipo de control químico acabamos las plagas pero también otros insectos benéficos. Eso, sin contar el efecto dañino que esos químicos causan al ser humano, asintieron.
Los conocimientos que adquirimos son de gran utilidad. Ahora sabemos para qué sirven muchas plantas. Ahora, cuando empiezo a cortar alguna planta hasta lo pienso, porque en realidad todas tienen utilidad, dijo uno de los alumnos.
Los egresados revaloraron la cultura maya y manifestaron su temor a que las nuevas generaciones no reconozcan la importancia de los conocimientos que legaron nuestros antepasados, porque se pierden de forma paulatina.
Alumnos e invitados provenientes de diversas comunidades mayas compartieron este sábado sus experiencias en las mesas de trabajo que se instalaron durante las actividades de clausura.
Pbro Atilano Ceballos Loeza, director de la Escuela de Agricultura Ecológica
Los participantes destacaron que ahora saben porque se le llama a la tierra, Madre tierra y sobre todo, que ahora conocen cómo cuidarla. Por eso, cuando se quiere sembrar, es necesario fertilizarla para lograr la cosecha.
Asimismo, reconocieron la importancia de los conocimientos adquiridos en torno a la milpa, el solar, la composta, la lombricultura, la medicina tradicional, entre otros temas que formaron parte del plan de estudios del ciclo que se inició en febrero de 2010.
Durante la clausura se realizaron diversos eventos, en los cuales se reconoció la incansable labor de ésta institución educativa, que dirige el sacerdote Atilano Ceballos Loeza y que tiene como meta replantear un nuevo modelo de hacer agricultura, con respeto al medio ambiente.
Una de esas actividades consistió en compartir las antiguas anécdotas que hacen referencia al Kuxa'an súum o soga viviente. De igual forma, se hizo una ofrenda y se explicó que en la antigüedad, a la orilla de los pueblos mayas o después de cierta distancia, se encontraba una cruz y la gente, en ese entonces, dejaba como ofrenda una piedra.
Los asistentes compartieron sus vivencias culturales, como la forma de pedir a los dioses mayas llegar con éxito al destino, ayuda en las actividades programadas para el día o agradecer las cosechas logradas.
Hubo también algunos jóvenes que recordaron a sus abuelos: Él me decía que era necesario saber cuántas personas están en el monte; así, si no regresan ese día, se sabe cómo ir por ellos, manifestaron.
Después de estas reflexiones en torno a dichas antiguas formas de reverenciar a los dioses, don Antonio Mukul, sacerdote maya, concluyó con la ceremonia del Kú Saká.
Después de entregar los documentos que acreditan la formación de sus alumnos, los organizadores aprovecharon la ocasión para hablar del proyecto Kuxa'an su'um, que actualmente impulsa la escuela de manera conjunta con la asociación no gubernamental Heifer Internacional, para la cría de cerdos pelones, gallinas criollas y abejas meliponas, para con ello impulsar su estrategia Cadena de Vida, que desarrolle en las comunidades mayas procesos autogestivos.
La ceremonia de clausura terminó con un refrigerio. Asistieron los directivos de la Escuela de Agricultura Ecológica y Campesina de Maní U Yits ka'an; de la Fundación Produce Yucatán; la Universidad Autónoma Chapingo; la Universidad Autónoma de Yucatán y la radio XEPET, La Voz de los Mayas, entre otros invitados.