GUADALAJARA, 24 de diciembre.- Tras la violenta jornada registrada desde la madrugada del pasado domingo en los estados de Michoacán y Jalisco, hasta el momento las autoridades reportan 28 personas muertas, entre las que destacan ocho policías municipales.

Este lunes, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Jalisco (SSPEJ) da a conocer una nueva cifra, confirmando la muerte de dos personas en Jilotlán de los Dolores, además de un menor herido; también otros tres civiles ejecutados en Quitupan, otro policía muerto, perteneciente al Municipio de Ayotlán y dos civiles más lesionados por armas de fuego.

Al filo de las tres de la madrugada del domingo, se inició una serie de enfrentamientos entre Los Caballeros Templarios y las autoridades del municipio de Briseñas, en Michoacán.

Ya entrada la tarde de este lunes se confirmó que los cuatro policías municipales "levantados" en las inmediaciones de la Plaza de Toros Los Naranjitos, del Municipio de Pihuamo, Jalisco, aparecieron decapitados junto con otro civil.

Fue la noche del pasado domingo cuando los uniformados resguardaban la seguridad en las inmediaciones de la mencionada Plaza de Toros cuando un grupo de sujetos fuertemente armados, que se desplazaba en varias camionetas, uniformados de militar y con pasamontañas, "levantaron" a los cuatro uniformados sin dejar rastro alguno.

Lamentablemente, este lunes, fueron hallados los cuerpos de los uniformados, junto con otro hombre civil sin identificar, muertos.

A todos los decapitaron.

Por todo esto, ya suman 28 los fallecidos entre Michoacán y Jalisco.

Las investigaciones de la emboscada y muerte en los límites de Jalisco y Michoacán arrojan que fue los culpables forman un comando de integrantes del grupo criminal "Los Caballeros Templarios".