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MÉRIDA, Yucatán, 27 de enero.- Eduardo Seijo Solís, presidente del Consejo Coordinador Empresarial Turístico de Yucatán, reclamó las alzas en las tarifas para extranjeros y nacionales en las zonas arqueológicas.
El empresario deploró que Cultur y el INAH decidieran subir las tarifas sin avisar a los prestadores de servicios turísticos.
Declaró que no es justo que sean convocados a reuniones para determinados asuntos y sin aviso haya un aumento en las zonas arqueológicas, lo cual afecta a los prestadores de servicios turísticos.
Eduardo Seijo, presidente del Consejo Coordinador Empresarial Turístico de Yucatán.
En 2012, la entrada a Chichén Itzá costaba $177 a los extranjeros y este año subió a 182 pesos. Lo mismo sucedió en otras zonas, como Uxmal y Dzibilchaltún.
La entrada costaba $125 en 2012 subió a $128 para los nacionales. También subió el precio para presenciar los espectáculos de luz y sonido.
Seijo explicó que los guías turísticos, agencias de viajes y transportistas de turismo tienen un paquete que alistan con un año de anticipación con todos sus precios y luego se ven desfasados por las alzas en las zonas arqueológicas y ya no pueden hacer ajustes en sus precios de servicios, por lo que tienen que absorber esas alzas. De ahí la molestia del sector porque no se les avisa para que tengan tiempo de ajustar sus tarifas.
También se ven perjudicados los prestadores de servicios nacionales y extranjeros que promocionan viajes a Chichén Itzá, Uxmal y Dzibilchaltún.