410 palabras
SAN ANTONIO, Texas, EE.UU., 12 de junio.- Apenas iniciaba la ceremonia de presentación del tercer juego de las finales de la NBA. El Heat enfrentaría a los Spurs en su visita a San Antonio.
Los organizadores presentaron a un pequeño de 10 años, de ascendencia mexicana, para interpretar el himno de EE.UU. El jovencito, de rasgos hispanos bien recibidos, vistió con un elegante vestido de mariachi, propio de la cultura folklórica mexicana.
Apenas empezaba los primeros tonos del canto a capela, y los murmullos del estadio sonaban más al asombro que al abucheo. Pero rápidamente la pontente voz del niño convenció a los asistentes, con un perfecto inglés y además, con una entonación digna de un evento como las propias finales de la NBA.
Sebastien de la Cruz, de 10 años de edad, entonó el himno de EE.UU. vestido de mariachi. El estadio lo aplaudió, pero las redes sociales lo reprimieron.
Mentras eso ocurría, en Twitter, la gente no paraba de enviar mensajes de carga negativa y en algunos casos, racista: "¿En verdad tienen a un mexicano cantando el himno en San Antonio? Váyanse al infierno". "¿Por qué tienen a un inmigrante indocumentado cantando el himno de los EEUU?". "¿Quién dejó a ese 'espalda mojada' que cantara el himno?". "Miami=niña blanca canta himno. San Antonio=mexicano canta himno. Pensé que todo era Estados Unidos".
Esos son sólo alguno de los miles de comentarios que circularon anoche por la red durante el encuentro entre los equipos de basquetbol. El partido continuó sin incidencias, en una clara demostración de triunfo por parte de los Spurs en San Antonio.
No fue sino hasta la mañana siguiente cuando el niño Sebastien, en una franca demostración de madurez y tranquilidad, respondió a todos esos comentarios en televisión. "Ellos no saben nada. De hecho, mi papá estuvo en la Marina de EE.UU. por mucho tiempo, y ellos sólo asumen que soy mexicano. Yo no soy de México, nací y crecí en San Antonio, y soy fan de los Spurs". (Agencias)