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Definitivamente debe existir algún móvil político que haya llevado al rector de la Universidad Autónoma de Yucatán, Alfredo Dájer Abihmeri y al Director de la Facultad de Derecho de nuestra máxima casa de estudios, José Luis Vargas Aguilar, a emitir una convocatoria a modo para elegir presidente de la sociedad de alumnos de la Facultad de Derecho, favoreciendo de modo evidente e inequitativo, a uno de los contendientes, hijo de Jorge Carlos Ramírez Marín —diputado federal priista y actual presidente de la cámara de diputados— manifestó Samuel Gómez Xecé, presidente de la sociedad de alumnos del referido plantel educativo.
Manifestó que la ilegítima maniobra deja sin posibilidades de competir a dos aspirantes con legítimo derecho a hacerlo y que desde hacía tiempo habían establecido contacto con el estudiantado como son Esteban Fuentes Zapata, pariente por cierto del legislador priista Rolando Zapata Bello y José Magaña Uc.
Indicó que al momento de entrar a hablar con el director del tema electoral, éste le indicó que existía un acuerdo al respecto entre el rector y los presidentes de las dos federaciones estudiantiles que coexisten en la universidad Felipe Romero Padilla y Cristián Oliva Avilés, para que la convocatoria fuera emitida por el presidente de la Federación que integraba, Felipe Romero Padilla, el presidente de la sociedad de alumnos (Gómez Xecé) y el visto bueno del director del plantel, cosa que respondió desconocer.
En tal sentido, apercibió al presidente de la federación a la que pertenecía (Felipe Romero Padilla), para que lo impusiera de los términos del ya citado acuerdo, pero éste le ripostó que no había nada acordado, por lo que le hizo entrega de su convocatoria a elecciones, a efecto que Romero la llevara ante el rector, para que éste diera su visto bueno, situación que se hace por cuestión de cortesía institucional, toda vez que se trata de un asunto de interés estudiantil en exclusiva, en el que las autoridades docentes se supone no tienen injerencia.
Al acudir a la universidad con la convocatoria, le dicen a Romero Padilla que en virtud de los acuerdos existentes entre el rector y los dirigentes de las federaciones, "ésta carecía de validez".
Cabe mencionar que la convocatoria de marras, deja fuera a Magaña Uc por ser alumno de quinto grado y a Fuentes Zapata, por su carácter de alumno repetidor. Gómez Xecé afirmó que desde su particular punto de vista, las convocatorias no deben ser excluyentes ni limitativas y deben brindar igual oportunidad a todos los alumnos de la facultad, sin importar el grado que cursen ni si han repetido algún año, pues no existen alumnos de primera o segunda, sino que todos deben disfrutar de los beneficios de esta calidad.
Consideró que no existe motivo para solicitar un mínimo de promedio, toda vez que esto es requisito para la elección de consejero alumno y no para presidente. Aseveró que el hecho de que un alumno se encuentre cursando el quinto grado, no es obstáculo para ser presidente, siendo él mismo constancia de que pese a ello, se puede estar pendiente de las necesidades del estudiantado y a su servicio.
Externó que su postura ante los comicios es fruto de que él recibió oportunidad de participar y por tanto, quiso obrar en consecuencia. Añadió que al enterarse de los arreglos en lo oscurito entre el rector y los líderes estudiantiles, renunció a la federación a que pertenecía, debido a que en ningún momento le consultaron su parecer.
Lamentó que por cuestiones políticas ajenas a la facultad se deje fuera a gente con derecho a participar y lamentó que el director del plantel de alguna forma lo presionara indicando que solo tenía el camino de apegarse a ella, o el desacato.
Indicó que para dar visos de legitimidad a la convocatoria ilegalmente lanzada por las autoridades de la UADY, se adhirieron tres aspirantes más para constituirse en comparsa de Ramírez Granados.
Expresó que la actitud de la dirección del plantel evidencia que hay gato encerrado, al llevar guardias privados a resguardar las instalaciones, cuando la actitud de los alumnos siempre fue pacífica, al mandar quitar las rejas del edificio y suspendiendo las labores docentes de modo unilateral
Reiteró su deseo por que prevalezca el diálogo, haciendo votos por poder encontrar el modo de encauzar los sucesos dentro del ámbito de la legalidad para hacer con ello honor a su alma mater.
Tras platicar con el líder estudiantil, este reportero intentó infructuosamente platicar al respecto con el director de la Facultad de Derecho, José Luis Vargas Aguilar, por cierto hermano de Elizabeth Vargas Aguilar, síndico del ayuntamiento priista que encabeza Angélica Araujo y con el rector de la UADY, Alfredo Dájer Abihmeri, pero pese a solicitar cita personal y telefónicamente y dejar incluso su número de teléfono celular, nadie se comunicó jamás. Como los amables lectores podrán colegir, quien calla otorga...