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Regidores priistas niegan a sus colegas panistas el derecho de expresar su inconformidad en el tema de elección de comisarios
La sesión extraordinaria de Cabildo esperada por los regidores panistas para dar a conocer su postura a la elección de comisarios y subcomisarios del municipio, efectuada el domingo pasado, volvió a convertirse en mordaza para los funcionarios, quienes se vieron imposibilitados a señalar anomalías en el procedimiento debido a que el secretario del Ayuntamiento de Mérida, Santiago Altamirano Escalante les negó sistemáticamente el derecho legal que tienen a hablar.
Mientras Daniel Granja Peniche, presidente de la Comisión Especial para la Elección en las Comisarías, leía el informe de las actividades de la comisión a su cargo, el regidor panista Luis Canto García interrumpió la lectura para señalar que la presentación había omitido diversas irregularidades.
Santiago Altamirano inmediatamente le pidió que guardara silencio, que dejara al regidor priista continuar su lectura y que tendría oportunidad para expresar su opinión.
La lectura de Daniel Granja prosiguió, pero Luis Canto volvió a interrumpir y de nueva cuenta fue silenciado por el secretario de la Comuna.
Al término de la intervención de Daniel Granja, Santiago Altamirano dio por terminada la sesión pidiendo a la alcaldesa de Mérida, Angélica Araujo Lara que la diera por clausurada.
En respuesta, la regidora panista Lissette Mimenza Herrera pidió la palabra para informar que tenían comentarios qué agregar al respecto. Pero la respuesta de Santiago Altamirano fue tajante: Esto no está sujeto a aprobación, es sólo una presentación de la Comisión Especial. Si quiere hacer comentarios, espere a una sesión donde se contemplen asuntos generales.
—Pero eso puede enriquecer el tema, insistió la regidora.
Sin embargo, Santiago Altamirano dio por terminada la sesión y Angélica Araujo la clausuró. Los regidores priistas se levantaron para abandonar la sala.
Entre consignas contra los regidores panistas, el regidor Humberto Evia Jímenez, quien también les dio un pan de muerto para señalarles que el PAN ha muerto; se retiró con sus compañeros priistas.
Molestos con la situación, Claudia Canto, regidora del PAN, destacó la actitud de Evia Jímenez y su falta de tolerancia hacia quienes piensan distinto a la mayoría priista.
Los alegatos de la ex directora de Finanzas y Tesorería del Ayuntamiento de Mérida se vieron apoyados por vecinos y por la ex candidata al comisariado de Dzununcan, Isabel Cristina Dzul Celis, quien criticó el informe presentado por Daniel Granja sobre la realización de la elección.
—El regidor dijo que se impartió capacitación. Que me diga, cuándo, dónde y a quiénes, porque yo jamás tomé un solo curso, porque no hubo tal.
Destacó que, además, el regidor también incurrió en mentiras al señalar que el proceso electoral había comenzado cerca de las 8:40 de la mañana, al indicar que en su comisaría el proceso inició después de la diez.
—Las votaciones se hicieron sin lista nominal y, sin embargo, pidieron credencial de elector a la gente que fue a las urnas. Además, a mi gente no la dejaron votar.
Yo tuve que empeñar mis alhajas para participar en la elección como candidata y el PRI apoyó a mi rival con el reparto de carne. Eso es injusto, pero yo volveré, aunque sea en el 2012, volveré.
Al respecto, Luis Canto comentó que Dzununcán es una de las siete comisarías que no aprobaron como parte de la Comisión Especial, ya que la diferencia de votos entre el candidatos es mínima —2 o 3 votos— además del número de votos anulados, que con un nuevo recuento podrían dar mayor certeza al proceso electoral.
—Pero se negaron a hacer ese recuento.
Hoy está de luto la democracia.
Los panistas también criticaron el retiro de sellos del lugar donde se resguardaron los paquetes electorales porque le quitó certeza a la elección.
Claudia Canto manifestó que el arresto del empleado municipal Jose Barbosa Couoh, acusado de retirar los sellos, fue un circo del PRI, que vio en el intendente a su chivo expiatorio. L.I.