1409 palabras
PALAMÓS, Girona, 9 de junio.- El claustro románico de Palamós es una construcción auténtica del siglo XII, según el profesor de Historia del Arte de la Universidad de Girona (UdG) Gerardo Boto, que ha podido visitarlo hoy por primera vez tras descubrirlo a través de una revista francesa de decoración.
Boto, que prefiere dejar el veredicto final en manos de los técnicos de la Generalitat que ayer accedieron al emplazamiento para realizar las pruebas necesarias, ha admitido, sin embargo, que para él la antigüedad de la pieza no admite dudas.
El desgaste de la piedra y, sobre todo, un emblema heráldico en forma de castillo y que representa la corona de Castilla, es una de las claves, a su juicio, del origen del claustro.
El Mas del Vent -una casa de lujo de la Fosca, en Palamós (Baix Empordà)- guardaba secretamente en el patio una de las joyas del Románico que nunca ha sido ni estudiada ni catalogada. (Fotos de Marcel-lí Sàenz/ EL PAÍS)
Boto ha accedido hoy a la finca Mas del Vent, donde se halla la construcción, en la primera visita abierta a medios de comunicación, después de que los dueños de esta masía permitieran ayer la presencia de los técnicos de la Generalitat.
Josep Comas, presidente del consejo de administración de la empresa Explotaciones Agrícolas y Forestales Brugarol, propietaria del terreno, ha manifestado su predisposición a colaborar con la investigación y a aceptar el dictamen de la normativa patrimonial, si se confirma la autenticidad del claustro.
Comas ha explicado que, entre la documentación de que dispone la empresa, figura el contrato de compraventa del monumento a un particular en Madrid en 1958, por el precio final de un millón de pesetas de la época.
Figuras humanas y jabalíes entre las representaciones que pueden apreciarse en los capiteles dobles del claustro.
En ese momento, el claustro se hallaba en un solar del distrito madrileño de Ciudad Lineal, según ha detallado el representante de sus actuales propietarios.
Comas desconoce la iglesia de la que procede el monumento si es que se confirma su autenticidad, mientras que Boto está convencido de que procede de Castilla y que entronca con la construcción del monasterio de Silos en Burgos.
Sin embargo, ha destacado la "enorme dificultad" del traslado desde Madrid hasta Palamós, donde fue reconstruido piedra a piedra por especialistas en la materia.
El presidente de la empresa propietaria ha reiterado que nunca se ha pretendido ocultar la existencia del claustro y ha recordado que un reportaje en una revista francesa de decoración fue el que dio la pista a Boto.
La construcción fue trasladada pieza a pieza desde Madrid a Palamós (Girona) en 1958.
Comas dice desconocer si la Generalitat, como manifestó su director de Patrimonio, Joan Pluma, les había solicitado a través de diversas cartas permiso para enviar a técnicos que certificaran la autenticidad del monumento, "aunque es posible, pero cuando han telefoneado y razonado su petición no ha habido problemas".
Las galerías claustrales que se hallan en el interior de Mas del Vent constan únicamente de dos laterales y, según las fotografías del montaje que constan en el Archivo Municipal de Palamós, originalmente pudo haber un tercero, aunque Comas desconoce este aspecto.
Boto ha agradecido la apertura de puertas de la finca al alemán Kurt Engelhorn, integrante de la familia fundadora de los laboratorios BASF y poseedor de una de las mayores fortunas del mundo según la revista Forbes, como propietario de la sociedad que la gestiona.
Vecinos consultados por Efe recuerdan la presencia en Palamós en la década de los sesenta de la familia Engelhorn, que también poseerían otras residencias en esta zona de la Costa Brava.
Comas ha relatado que personalidades como el escritor catalán Josep Pla habían visitado Mas del Vent que, en la actualidad, se alquila para la organización de eventos, aunque también cuenta con unos terrenos de cultivo.
El profesor de Historia del Arte de la UdG, Gerardo Boto, ha hecho público un estudio que determina que se trataría de un claustro original, del siglo XII, de unas características similares al de Santo Domingo de Silos y de unas dimensiones "muy notables".
El conseller de Cultura, Ferran Mascarell, ha descartado hoy una hipotética salida de Cataluña del claustro románico descubierto en una finca de Palamós, cuyo origen apunta a Castilla, en base a que su compra en la década de los años 50 a un anticuario de Madrid fue legal.
"Mi opinión personal es que no hay razones para moverlo, porque no hay razones para pensar que no sea legal la compra que se hizo hace medio siglo, cuando las reglas del juego eran muy diferentes de las de ahora", ha manifestado Mascarell durante la inauguración del nuevo Archivo Comarcal de La Bisbal d'Empordà.
El conseller ha precisado de todos modos que, inicialmente, hay que conocer el veredicto de los técnicos que el pasado jueves accedieron al claustro para analizar su autenticidad.
En cualquier caso, Mascarell parte de que no hay "mala fe por parte de nadie en esta historia".
Y ahora, ha añadido, de lo que se trata es de conocer "el grado de originalidad del conjunto e investigar el origen del claustro", así como determinar "la predisposición y voluntad" de los propietarios, aunque le parece "una buena señal" que estos "finalmente entrasen en razón desde el punto de vista del permiso y la posibilidad de que se pudiese ver el material".
El claustro románico, descubierto a través de una revista de interiorismo francesa por el profesor de la Universidad de Girona Gerardo Boto, se halla en el interior de una finca privada.
Sobre el análisis de los técnicos, el conseller ha reiterado que se conocerá "en los próximos días", pero que tardarán "lo que necesiten, porque no hay prisa, esto -ha subrayado- no es una carrera de científicos".
"Tenemos la obligación de determinar las cosas bien y, cuando esté a disposición de todos, lo haremos publico y, en función de eso, determinaremos las cosas que haya que hacer, que me parece que están bastante claras", ha añadido Mascarell.
Respecto a un posible alteración del conjunto, ha remitido nuevamente cualquier posicionamiento de las autoridades al examen de los expertos, aunque su opinión es la de que "el claustro ha estado razonablemente cuidado"
En consecuencia, el responsable catalán de Cultura limita la intervención de la administración "si es un bien patrimonial" a gestionar la manera de que sea posible la visita del público. (EFE)
Boto comenzó a investigar el hallazgo al ver que no había ningún documento que acreditara la existencia de este claustro en esta finca ni tampoco ningún documento que confirmara la autenticidad.