CIUDAD DE MÉXICO, 8 de junio.- Ayer se celebró el Día de la Libertad de Expresión en un marco en el que, como quizá nunca antes, las redes sociales cobran cada vez un mayor valor.

Aun con naturales restricciones, en ellas cada ciudadano puede expresarse de manera libre, pese a que algunos comentarios conlleven riesgos y a pesar de algunos intentos por impulsar la regulación en los medios de comunicación.

En la comunicación institucional las cosas son distintas. Mientras en las redes sociales existe una elocuente libertad de expresión, el mundo del periodismo se ve amenazado fundamentalmente, en el caso de México, por balas que intentan acallar a los comunicadores que hablan, particularmente, de la inusitada violencia.

En el día de la libertad de expresión se recuerda al gobernador don Carlos Loret de Mola Mediz, periodista fallecido en el Estado de Guerrero en 1986, presuntamente por encargo de personajes a quienes denunciaba en sus escritos.

Tan sólo del año 2000 a la fecha, el número de periodistas que han perdido la vida en México en el ejercicio de su profesión es de 110, y la gran mayoría de los casos –en los que casi todas las evidencias apuntan al crimen organizado como autor de los asesinatos−, permanecen sin resolverse.

En un intento por paliar los efectos de ese fenómeno, ayer la Comisión Permanente del Congreso de la Unión declaró la constitucionalidad de las reformas que obligan a la PGR a atraer todos los crímenes cometidos contra periodistas, con lo cual, a partir de esta semana, todos los delitos cometidos contra los comunicadores dejarán de ser investigados por los gobiernos locales.

Se trata de una medida no de privilegio para un determinado segmento de la población, sino de un paso trascendental en la protección de los derechos fundamentales a la información y a la libertad de expresión de los que debemos gozar todos los ciudadanos por igual.

Mientras, desde Santiago de Chile, el presidente Felipe Calderón recordó que el 7 de junio se celebra en México, desde 1951, el Día de la Libertad de Expresión.

'Así que, quiero felicitar muy sinceramente a las y a los periodistas mexicanos; también, a sus colegas chilenos, por su trabajo, su dedicación, su profesionalismo, que son esenciales para preservar y fortalecer las libertades y la democracia en nuestros países.

'Felicito, especialmente, a las y a los periodistas que recurrentemente me acompañan en mis labores cotidianas dentro y fuera del país.