328 palabras
Domingo 14 de octubre.- Sabotaje. Un desastre ambiental como arma.
¿Se atreverá la Guardia Revolucionaria de Irán a desencadenar un pandemónium económico y ecológico? Según información obtenida por Spiegel, un documento secreto indica que Teherán planea causar un 'accidente' para bloquear el Estrecho de Ormuz y contaminar el Golfo Pérsico como medida contra las sanciones impuestas por Occidente.
El Estrecho de Ormuz, de importancia estratégica para la salida del petróleo. Arriba, Irán. Abajo, Arabia Saudí, los Emiratos y Omán. En el recuadro, el ayatolá Alí Jamenei. (DPA)
Según conclusiones de inteligencia occidental, Mohammed Ali Jafari, comandante de línea dura de la Guardia Revolucionaria iraní, ha desarrollado, junto con el almirante Ali Fadawi, un plan de sabotaje que amenaza a todo el Golfo y podría conducir a un caos ambiental. El plan, en posesión de Spiegel, lleva el nombre Trübe Wasser ("Aguas turbulentas") y es "Top Secret". El Estrecho de Ormuz quedaría contaminado por el desastre petrolero provocado deliberadamente en algún buque (o en varios).
Este panorama trastornaría las rutas marítimas internacionales y los buques petroleros se verían bloqueados y, por lo tanto, los estados árabes hostiles a Irán se verían perjudicados. Sería forzoso que Irán participara en la limpieza a gran escala de las aguas y casi seguro se suspenderían las sanciones de Estados Unidos.
El plan secreto de los Guardianes de la Revolución que, en la teocracia iraní, forman un Estado dentro del Estado, tienen al Ejército y sólo se espera la orden del líder supremo Ali Jamenei, la autoridad final que determinaría su aplicación.