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Al abandono y rapiña de los Centros de Superación Integral, como el de San José Tecoh, el corte de energía eléctrica del Rastro Municipal por falta de pago y a la deuda con las recolectoras de basura, el Ayuntamiento de Mérida, en manos de Angélica Araujo Lara y ahora a cargo del primo de la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco, Álvaro Omar Lara Pacheco, se suma, la parálisis en programas que desde el año pasado afecta a meridanos, especialmente a los jóvenes.
De acuerdo con información de la página web del Ayuntamiento de Mérida, el Instituto Municipal de la Juventud, no realiza cursos desde el año pasado. En el apartado de talleres, se lee que el último curso de ejecución de instrumentos musicales se llevo al cabo del 5 de septiembre al 29 de octubre de 2011. Los talleres de dibujo aerográfico y canto sufrieron la misma suerte.
En el olvido y peor aún, en el corredor de la muerte se encuentran todos los días cientos de perros y gatos que llegan a la perrera municipal, ya que el programa "Adopta un amigo", instituido y promovido por la administración municipal anterior para buscar un hogar a los animalitos que llegan a ese lugar, tampoco está funcionando. La página web, que es exactamente la misma que elaboró el Ayuntamiento de César Bojórquez Zapata, continúa siempre —sin explicación alguna— sin perros o gatos que ofrecer en adopción.
Pero no son los únicos. Las mujeres severamente maltratadas por sus parejas también están en el abandono. Hace unos meses, el Centro de Desarrollo Integral y Atención a la Violencia Intrafamiliar (CIAVI), conocido como "La Casa de la Mujer", cerró su "Casa Refugio para Mujeres Víctimas de la Violencia", un lugar en el que las mujeres afectadas por este problema podían, junto con sus hijos, esconderse de hombres que amenazaban su integridad física y emocional.
Cabe mencionar, que pese al escándalo que suscitó este hecho, dado a conocer por los regidores del PAN, el Ayuntamiento de Mérida aún "promociona" este servicio en la página del CIAVI. Además, presume los reconocimientos que esta institución ha logrado, aunque dichos logros se hayan obtenido únicamente en administraciones panistas.
Al inicio de la administración municipal, Angélica Araujo también afectó a otro sector vulnerable de la población al cerrar sin explicación alguna "La Casa de los Niños", un lugar en donde se les proporcionaba alimento, atención médica y psicológica, así como apoyo escolar a los hijos de los locatarios de los mercados del Centro Histórico.
El Instituto Municipal de Prevención a las Adicciones (IMPA), que en la administración municipal anterior se mantuvo muy activo con cursos y talleres de combate de adicción a drogas y al consumo de alcohol especialmente en niños de primaria y estudiantes de secundaria y preparatoria, hoy está reducido a información general de talleres sin precisar dónde y en que horario se otorgan.
El Ayuntamiento de Mérida también cerró definitivamente cinco programas que mantenían a la administración municipal cerca de la ciudadanía, como Miércoles Ciudadano, Ayuntamiento en tu colonia, Ayuntamiento en tu comisaría, Programa radiofónico "Conexión Mérida" y Reto Joven.
Desde hace más de 20 años, el Ayuntamiento de Mérida se distinguió por adquirir, en cada administración municipal, certificados de calidad en sus programas, servicios y dependencias, razón por la cual logró reconocimientos en administración por calidad, Atención Ciudadana, Catastro, Contraloría, DIF municipal, Desarrollo Económico, Desarrollo Urbano, Finanzas, Proveeduría y Ventanillas Únicas Municipales.
En los dos años de administración municipal, el Ayuntamiento de Mérida no ha logrado ninguna certificación a pesar de que aparece anunciado en su página que proximamente lo recibirían por el Instituto Municipal de Salud, Desarrollo Social y Servilimpia.
Cabe mencionar, que precisamente en esas áreas el Ayuntamiento de Mérida ha "destacado" por irregularidades, como por ejemplo el cierre de los módulos de salud durante todo un día y sin previo aviso en plena temporada de dengue; el abandono de los Centro de Superación Integral y el deterioro de los vehículos de Servilimpia. L.I.