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CIUDAD DE MEXICO, D.F., 15 de mayo.- En un comunicado, Benítez Treviño dijo que “el juicio de la opinión pública afectó la imagen y percepción hacia la PROFECO como institución, y hacia su persona como servidor público, e incluso repercutió en su familia”.
Benítez Treviño reiteró que no tuvo injerencia en los hechos sucedidos el pasado 26 de abril en la colonia Roma.
El ex funcionario federal reiteró que no tuvo injerencia en los hechos sucedidos el pasado 26 de abril en la colonia Roma, en la verificación fuera de los reglamentos de la dependencia en el restaurante Maximo Bistrot, y que como funcionario siempre actuó con honestidad.
“Como Procurador Federal del Consumidor siempre actuó con honradez personal e institucional, con lealtad, imparcialidad, rectitud y patriotismo”, detalló.
Benítez Treviño reconoció el profesionalismo y lealtad institucional de los trabajadores de PROFECO, gracias a lo cual dijo “se lograron importantes avances en la protección de los derechos de los consumidores, con acciones inéditas en la historia de la institución”.
Asimismo, agradeció al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto la oportunidad de colaborar durante estos meses con su gobierno, desempeñando el cargo, y reconoció el apoyo solidario e incondicional del titular del Secretario de Economía, Ildefonso Guajardo.
Al dejar la titularidad de la PROFECO defendió que en su gestión se lograron "importantes avances en la defensa de los consumidores".
Tras conocerse su remoción como titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), Humberto Benítez Treviño, aseguró que siempre actuó "con honradez personal e institucional, con lealtad, imparcialidad, rectitud y patriotismo".
Incluso dijo que en su gestión se lograron "importantes avances en la protección de los derechos de los consumidores, con acciones inéditas en la historia de la institución".
Al despedirse del personal de la dependencia y ratificar su lealtad al Presidente Enrique Peña Nieto, quien determinó removerlo del cargo por el escándalo desatado a raíz de que su hija logró que personal de PROFECO realizara una inspección y suspendiera un restaurante de la colonia Roma, el ahora ex funcionario insistió en que no tuvo injerencia al respecto.
No obstante, según un comunicado de la dependencia, Benítez Treviño reconoció que "el juicio de la opinión pública afectó la imagen y la percepción hacia PROFECO como institución y hacia su persona como servidor público e incluso repercutió en su familia".
Agradeció al Mandatario Federal permitirle colaborar con él y manifestó su reconocimiento al "apoyo solidario e incondicional del secretario de Economía, Ildefonso Guajardo", así como el profesionalismo de los trabajadores de PROFECO y expresó su agradecimiento al Sindicato Nacional de Trabajadores de la institución.
Luego de ser anunciada su remoción como titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO), Humberto Benítez Treviño agradeció al Presidente Enrique Peña Nieto la oportunidad que le dio para colaborar en su Gobierno.
En su despedida reconoció el profesionalismo y lealtad institucional de su personal y agradeció al Sindicato Nacional de Trabajadores de la PROFECO su labor en la institución, ya que con su ayuda "se lograron importantes avances en la protección de los derechos de los consumidores".
El funcionario enfatizó en un comunicado que durante su administración siempre actuó con "honradez, lealtad, imparcialidad y rectitud", e insistió en que no tuvo injerencia en los hechos sucedidos el 26 de abril en la colonia Roma, cuando su hija intentó cerrar un restaurante por no conseguir la mesa que quería.
Benítez Treviño reconoció que el juicio de la opinión pública afectó la imagen y percepción hacia la PROFECO como institución, así como hacia su persona como servidor público, e incluso repercutió en su familia. (Milenio/La Jornada/El Universal)