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LOS ANGELES, California, a 18 del julio del 2013.- Luego del barco, el ferrocarril, el automóvil y el avión, el mundo se prepara para conocer el próximo 12 de agosto al quinto medio de transporte creado por el hombre.
Ese día, el genial fundador de PayPal, el sistema de transferencias y pagos por internet más exitoso del mundo, y Tesla Motors, fabricante del auto deportivo ciento por ciento eléctrico, mostrará al mundo el diseño del Hyperloop.
Imagínese viajar de Nueva York a Los Ángeles en tan solo 30 minutos (560 kilómetros), o de Washington DC a Beijing en menos de dos horas, sin retrasos ni paradas, sin riesgos de choque, a bajo costo y en un medio de transporte silencioso y ecológico. Suena a ciencia ficción, pero tal vez estemos cerca de que se convierta en una realidad.
Se ha esforzado por guardar un cauteloso silencio en torno a las características que tendrá su nuevo invento. Pero por la información que fue soltando, más los datos que se filtraron, nadie duda de que si cumple con lo que promete se trate de algo que revolucionará el mundo del transporte.
El proyecto consiste en una cápsula con capacidad para un pequeño número de personas que se traslada por un estrecho tubo de un destino a otro, a una velocidad supersónica. El ejemplo que dio Elon Musk es el viaje Los Ángeles-San Francisco (560 kilómetros), un recorrido muy frecuentado por los hombres de negocios estadounidenses, que en avión dura 1 hora y 20 minutos. A bordo del Hyperloop tomaría apenas 30 minutos.
Como si fuera poco, a diferencia del transporte aéreo, es barato y no contaminante, ya que funciona a partir de energía electromagnética y solar, provista a través de los paneles que se colocan a lo largo de todo el camino, por encima del tubo.
Musk lo definió como un "servicio no programado que sale cuando los pasajeros llegan, es inmune al clima y nunca colisiona".
"Es una mezcla entre un Concorde, un cañón de riel y un hockey de mesa", precisó en una de las pocas declaraciones públicas que hizo sobre su misterioso proyecto.
No es casual que Musk haya dado como ejemplo el viaje entre Los Ángeles y San Francisco. En parte, su invento es una respuesta al tren bala que se proyecta en el estado de California, al que se opone firmemente por considerarlo el tren bala "más lento y caro del mundo".
“El sistema ET3 podrá alcanzar una velocidad inicial de 600Km/h (370 mph) en un viaje interestatal, y correr a 6.500 Km/h (4.000 mph) en un trayecto internacional”, afirma el sitio web.
Por eso pidió a las autoridades que consideren su invento, mucho más económico y sustentable, y tres o cuatro veces más veloz.
Además, mostrando una vez más su perfil filantrópico, anticipó que no pretende patentar el producto. "Realmente odio las patentes, a menos que sean necesarias para la supervivencia de la compañía. Publicaré el Hyperloop como un código abierto", anticipó Musk.
Existe el antecedente de un proyecto de medio de transporte muy similar. En 1972, R.M. Salter, un investigador de la Corporación RAND, diseñó el VHST (Sistema de Tránsito de Muy Alta Velocidad).
"Los principios generales son muy directos: autos electromagnéticamente levitados, propulsados a través de un túnel", según describió Salter en uno de sus papeles de trabajo.
"Circula impulsado por ondas electromagnéticas de la misma manera en la que una tabla de surf se desliza sobre las olas del océano. Las ondas son generadas por un pulso o por oscilación, y circulan por conductos eléctricos que forman la estructura de rieles sobre la que se mueve el vehículo", agregaba.
El proyecto consiste en una cápsula con capacidad para un pequeño número de personas que se traslada por un estrecho tubo de un destino a otro, a una velocidad supersónica.
Pero Salter nunca pudo poner en práctica su idea. Así que para ver en funcionamiento este revolucionario medio de transporte del futuro habrá que esperar hasta el próximo 12 de agosto, la fecha en la que, según anticipó Musk en su cuenta de Twitter, será presentado el diseño del Hyperloop y todas las especulaciones concluirán.
Imagínese viajar de Nueva York a Los Ángeles en tan solo 30 minutos (560 kilómetros), o de Washington DC a Beijing en menos de dos horas, sin retrasos ni paradas, sin riesgos de choque, a bajo costo y en un medio de transporte silencioso y ecológico. Suena a ciencia ficción, pero tal vez estemos cerca de que se convierta en una realidad.
Este 12 de agosto próximo, el mundo conocerá el diseño del “Hyperloop”, que podría significar un cambio revolucionario en los medios de trasporte humano.
Además, mostrando una vez más su perfil filantrópico, anticipó que no pretende patentar el producto. "Realmente odio las patentes, a menos que sean necesarias para la supervivencia de la compañía. Publicaré el Hyperloop como un código abierto", anticipó Musk.
El sistema ha sido ideado por Elon Musk, el genial y multimillonario fundador de la empresa de transporte espacial SpaceX; Pay Pal, el sistema de pagos por internet más exitoso del mundo; y Tesla Motors, fabricante del automóvil deportivo ciento por ciento eléctrico.
Musk había dicho hace tiempo que “el sistema que tengo en mente, nunca tendrá accidentes, será inmune al tiempo meteorológico, y es de tres a cuatro veces más rápido que un tren bala actual”. Dijo también que se inspiró después de ver que un proyecto ferroviario de alta velocidad de California iba a ser el más lento y el más caro del planeta –70.000 millones de dólares-.
Generó varias especulaciones pero muchos pensaron que el invento surgiría varios años después. Para sorpresa de ellos, el empresario publicó esta semana en Twitter que lo presentará en menos de un mes.
El ejemplo que dio Elon Musk es el viaje Los Ángeles-San Francisco (560 kilómetros), un recorrido que en avión dura 1 hora y 20 minutos. A bordo del “Hyperloop” tomaría apenas 30 minutos.
Como si fuera poco, a diferencia del transporte aéreo, el nuevo sistema pretende ser barato y no contaminante.
Como si fuera poco, a diferencia del transporte aéreo, el nuevo sistema pretende ser barato y no contaminante, ya que funcionaría a partir de energía electromagnética y solar, provista a través de los paneles que se colocan a lo largo de todo el camino, por encima del tubo.
Si bien Musk ha mantenido en secreto su idea, algunos medios la relacionan con la de una empresa llamada ET3 (et3.com), asentada en Longmont, Colorado. Esa firma dice ser un consorcio abierto y asegura que está desarrollando un sistema de transporte a través de cápsulas para un pequeño número de personas que se trasladan por un estrecho tubo de un destino a otro, a alta velocidad.
El sistema del ET3 será como realizar, literalmente, un “viaje espacial en la Tierra”, asegura el sitio web de la compañía. Será “silencioso, eléctrico, ecológico, más rápido que los aviones y el tren bala, y lo mejor de todo, de bajo costo”.
Este proyecto dice que las personas viajarán sentadas en pequeñas cápsulas, del tamaño de un automóvil (en 1.5 metros por 5’ de diámetro) que se deslizan en tubos impulsados eléctricamente y sin fricción alguna durante el trayecto.
El aire se eliminará de forma permanente de los tubos de dos vías (uno de ida y otro de retorno) que se construirán a lo largo de una ruta de viaje. Unas bolsas de aire en las estaciones permitirán la transferencia de las cápsulas sin admitir aire.
Este proyecto dice que las personas viajarán sentadas en pequeñas cápsulas, del tamaño de un automóvil (en 1.5 metros por 5’ de diámetro) que se deslizan en tubos impulsados eléctricamente y sin fricción alguna durante el trayecto.
Las cápsulas serán lanzadas por motores eléctricos lineales a través de los tubos vacíos y una vez dentro de ellos no utilizarán ningún otro tipo de energía hasta llegar a destino.
“El sistema ET3 podrá alcanzar una velocidad inicial de 600Km/h (370 mph) en un viaje interestatal, y correr a 6.500 Km/h (4.000 mph) en un trayecto internacional”, afirma el sitio web.
Los tubos estarán conectados a una red, como las autopistas, excepto las cápsulas se envían automáticamente desde el origen al destino. Estas cápsulas pesarán sólo 183 kg (400 libras), pero al igual que un automóvil, podrán transportar hasta seis personas o 367 kg (800 libras) de carga.
Nadie sabe a ciencia cierta si el proyecto de Musk tiene o no conexión con el de ET3, pero el 12 de agosto lo sabremos, habrá que esperar. (Infobae\Diario de las Américas)