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MEXICO, D.F., 12 de agosto.- Concebidas como un medio de comunicación social y gratuito, las miniplataformas Twitter y facebook (se escribe así, con puras minúsculas) son las redes sociales más populares del último lustro y suman cientos de millones de usuarios en todo el orbe los que al menos hacen una conexión al día a través de estos micrositios pero, ¿son lo mismo? la respuesta es No, veamos las principales características:
Ambas redes sociales tienen en común un superior objetivo que es digamos el quid del asunto, “Crear Comunidad” pero cada una de ellas tiene también su diferente forma de lograrlo.
La red social facebook permite agregar a las personas que conoces y deseas integrar a tu comunidad, personas a las que les tienes confianza para interactuar en un esquema comunicacional multivía (todos contra todos) y compartir cosas personales como fotos familiares o el video de tu hija que apenas empieza a caminar.
Este micrositio también te permite “etiquetar” en una publicación determinada a un conocido sin necesidad de agregarle definitivamente a tu comunidad, es decir, puedes hacer referencia a alguien sólo cuando tú quieras y la persona podrá ver el material en el que fue referenciada sin que necesariamente lea o vea todo lo que publicas.
La responsabilidad de las personas que se integran a la comunidad es del propio usuario, quien manualmente atiende cada petición de amistad, pudiendo ver el perfil del solicitante antes de aceptarlo para corroborar que se le conoce y decidir si se autoriza o no el acceso a la comunidad; incluso, si el solicitante es sospechoso, se puede reportar en ese momento como alguien que no se conoce y facebook se encargará de que el intruso no te vuelva a solicitar “amistad”.
En resumen, facebook es un lugar donde juntas a tus amigos y familiares en un ambiente medianamente privado y compartes con ellos el material multimedia que se te pegue en gana -claro sin violar las políticas de publicaciones de facebook-.
El Twitter por su cuenta es diferente en el sentido de la manera en que se crea comunidad, muchos usuarios confunden a Twitter como un chat entre varias personas y no sólo esperan, lo que es peor, exigen respuesta a planteamientos, dudas o reclamos directos que se le hacen a un usuario, esto es erróneo, veamos porque: En el Twitter hay dos condiciones que tenemos los usuarios de manera simultánea ser “seguidores” o ser “seguidos” es decir, un usuario sigue a determinada cantidad de seguidores y es seguido por otro grupo de personas sin que necesariamente tengan relación entre éstas, por ejemplo, yo puedo seguir al escritor español Arturo Pérez Reverte y a mí me puede seguir Juan Penas, pero Juan Penas NO sigue a Pérez Reverte y Pérez Reverte ni siquiera sabe que existe Juan Penas.
El Twitter es la más egocentrista de todas las redes sociales, en ella, más seguidores significan más lectores. La gente te sigue porque le interesan tus tuits, porque encuentran un valor en los materiales que publican. Entonces, la comunidad es el usuario y sus lectores, siempre así, porque tú formas parte de la comunidad lectora de cada una de la cuentas que sigues.
Por otro lado, en Twitter el propietario de una cuenta NO es responsable de las personas que le siguen, tampoco está obligado a responder preguntas o menciones, y si no está de acuerdo en que determinada cuenta le siga, puede bloquearla para prohibirle el acceso, también se tiene toda la libertad de seguir a x, y o z y aún más, dejar de seguir a alguna cuenta cuando se no dé la gana, sin que esto signifique una ofensa para la persona que dejamos de seguir. Simplemente ya no nos interesa leer sus textos.
En resumen, el Twitter es una comunidad que une a una persona con un grupo de lectores que tienen interés en lo que escribe y comparte a través de su cuenta.
Con esta información quizá sea más fácil decidir qué tipo de red social se ajusta más a nuestra necesidad de comunicarnos o si de plano mejor seguimos comunicándonos vía mensaje de texto y correo electrónico, por lo menos, esos métodos son de “bigote a bigote”. (Agencias)