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WASHINGTON, D.C., 9 de mayo.- La prensa estadounidense dio algunos detalles del operativo que permitió adelantarse a los planes de la red terrorista al Qaeda para hacer estallar un avión comercial en la víspera del aniversario de la muerte de Bin Laden.
La cadena ABC indicó que fue un agente infiltrado de la CIA quien logró hacerse de la bomba en Yemen, preparada para ser adherida a la ropa interior y así poder sortear los exámenes en los aeropuertos.
John Brennan, asesor antiterrorista de Obama, dijo: "Seguimos investigando quién pudo estar vinculado a la construcción del explosivo y confiamos en que este artefacto (en las fotos) y todo individuo que pudo haber estado designado para usarlo no constituyen más una amenaza para el pueblo estadounidense".
"Trabajaba en secreto para la CIA y otras agencias de inteligencia", y ahora ya se encuentra "a salvo fuera de Yemen", indicó ABC. El hombre logró dejar ese país con el explosivo para entregarlo a personal de esa agencia en Arabia Saudita.
Reportes posteriores publicados por The Washington Post y el New York Times agregaron, en base a testimonios de fuentes de seguridad, que las fuerzas saudíes prestaron una cooperación determinante para desarticular el complot. También indicaron que el "doble agente", que estuvo infiltrado por un tiempo no precisado en una célula de la rama yemení de Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP), logró informar sobre la ubicación del lugar donde se fabricó la bomba, que luego fue atacado por un avión no tripulado.
Enlace a El enigma del frustrado ataque suicida
El anuncio de que un plan para atentar contra un vuelo comercial con destino a los Estados Unidos había sido frustrado a fines de abril fue anunciado el martes por la agencia AP. Según explicaron fuentes anónimas, era"similar" al fallido intento que en la navidad de 2009 encabezó el nigeriano Umar Faruk Abdulmutalab en un avión que se dirigía a Detroit, también preparado por el mismo grupo.
"Ningún avión comercial" ni "ningún estadounidense o aliado" estuvo en peligro, afirmó la Casa Blanca el lunes. También informó que el presidente Barack Obamaconocía la situación desde abril.
El mandatario estadounidense "pidió al Departamento de Seguridad Interior, a las fuerzas del orden y a los servicios de inteligencia tomar las medidas necesarias para evitar esta clase de atentado", precisó un vocero del Consejo de Seguridad Nacional, Caitlin Hayden.
Los Estados Unidos se mantenían en un alto nivel de alerta en los días previos al primer aniversario delabatimiento del líder de esa red, Osama Bin Laden.
Los expertos están estudiando minuciosamente un nuevo explosivo de Al Qaeda para determinar si pudo haber pasado por los controles de seguridad de los aeropuertos y derribado un avión comercial, dijo este martes un alto funcionario antiterrorista del gobierno de Barack Obama.
Algunos funcionarios habían dicho un día antes a The Associated Press que el descubrimiento de la bomba sin estallar se debía a una operación encubierta de la CIA en Yemen y dijeron que la interceptación frustró una misión suicida cerca del aniversario de la muerte de Osama Bin Laden.
El explosivo no contenía metal, lo que significa que probablemente no habría sido descubierto por los detectores de metales de los aeropuertos. Pero no está claro si los nuevos detectores corporales utilizados en muchos aeropuertos habrían revelado que el extremista portaba el artefacto.
El artefacto es una versión perfeccionada del explosivo oculto en la ropa interior que no detonó en un avión que sobrevolaba Detroit en la Navidad del 2009. Los funcionarios dijeron que el nuevo explosivo, con un mejor sistema de detonación, también estaba destinado a ocultarse en la ropa interior.