1042 palabras
Martes 12 de junio.- Unos 215 millones de niños de todo el mundo se ven obligados a trabajar para subsistir, según han denunciado varias organizaciones sociales y sindicales ante la celebración hoy del Día Mundial contra el Trabajo Infantil.
Hay relación entre trabajo infantil y pobreza, puesto que son las familias de estratos sociales y económicos más bajos donde se instala el trabajo infantil, incluso en la mayoría de los casos los niños abandonan la escuela.
Ayer en Nueva< Delhi, un policía interroga a un niño rescatado en un operativo contra la explotación laboral infantil. Los agentes hallaron a 26 menores trabajando en fábricas textiles y metalúrgicas, pero docenas escaparon. (Kevin Frayer/Associated Press)
Por ello, se reclaman medidas en favor del empleo y del Estado del Bienestar, que garanticen a las personas una vida más digna, la sanidad, la educación, los servicios sociales y una renta mínima adecuada.
Otros de los factores que inciden en la pobreza infantil es el incremento del pago de los impuestos directos o indirectos que afectan a la renta de las familias y repercute en el gasto de los hogares destinados a cubrir la alimentación.
Una caída de rentas conlleva un consumo de alimentos de peor calidad y las dificultades para hacer frente a las hipotecas, con el riesgo de perder el hogar familiar.
Niño albañil en Peshawar, Pakistán. El 12 de junio fue el día mundial contra el trabajo infantil. (Umar Qayyum/Xinhua/Zuma Press)
Organizaciones como Mundo Cooperante han hecho suyas las reivindicaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) contra el trabajo infantil y para que los derechos de los niños estén protegidos.
Los 215 millones de niños que trabajan, recoge Mundo Cooperante en un comunicado, deberían estar en la escuela recibiendo educación y adquiriendo habilidades que les preparen para acceder a un trabajo "decente" en su vida adulta.
Asimismo, ha solicitado "mayores esfuerzos económicos y mayor voluntad política" para lograr el objetivo de la OIT de erradicar, para 2016, al menos las peores formas de trabajo y explotación infantil.
Por su parte, Misiones Salesianas ha recogido varias historias de menores que trabajan, como Pyale, una niña de Togo, que fue vendida a una familia rica "como esclava doméstica" y como ella, cientos de miles de menores.
Kofi, de nueve años, va cada día a trabajar al mercado de Oando en Porto Novo (Benín), como porteador, y Bala, de ocho años, trabaja haciendo ladrillos en Pessor (la India), donde cada jornada hace 250 con sus manos, según Misiones Salesianas.
Abdullah Altaf, de 10 años, trabaja en una fábrica de ladrillos en las afueras de Islamabad, Pakistán. (Muhammed Muheisen/Associated Press)
Para tratar que los pequeños pueda tener un futuro mejor, la organización cuenta con varios programas y espacios en países en desarrollo donde los niños trabajadores puedan acudir a clases de alfabetización y cursos de formación.
En todo el territorio nacional existen tres millones 14 mil 800 niños de cinco a 17 años que desempeñan trabajo económico, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo realizada en 2009.
Son más niños que niñas los que trabajan por un incentivo económico en el país, pues 67% de los varones realiza trabajo económico, en tanto que 33% de las niñas desempeñan este tipo de labores.
El trabajo que realizan los niños y las niñas se divide en dos ramos, el doméstico y el económico, según el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI).
El primero se refiere a las actividades que llevan a cabo dentro de su hogar sin recibir remuneración, en tanto que el trabajo económico son las actividades que desempeñan, como producción de bienes y servicios, recibiendo o no un pago por ello.
Entre las principales causas por las que una niña o niño desempeña trabajos económicos es porque en sus hogares requieren de los ingresos por su trabajo, lo que representa 28.6 por ciento.
En tanto, 23.4% de ellos trabaja para pagar escuela o gastos propios y 20.2% de los menores lo hace para aprender un oficio.
El 16% de los que trabajaban aporta la mitad o más de su salario al hogar en el que viven, según las cifras más recientes del INEGI en el marco del Día Mundial contra el Trabajo Infantil.
A su vez, 25% de los niños ocupados recibe hasta un salario mínimo, 24% recibe desde uno a tres salarios mínimos, dos por ciento recibe tres salarios mínimos y 47% no recibe paga alguna por su trabajo.
Por sector, 29.6% de los menores trabaja en el campo, 26.6% lo hace en el sector comercial y 23.8% en el de los servicios, además que de los niños y niñas que trabajan, 40% de ellos no asiste a la escuela, lo que representa un millón 195 mil 744 menores.
La mayor proporción de niños que desempeña actividades económicas se ubica en Guerrero con 17.5%, seguido de Nayarit con 16.6 y Zacatecas con 16.2 por ciento. Las entidades que tienen una menor proporción de niños que trabajan son Chihuahua con 3.3%, Distrito Federal con 5.2 y Baja California con 5.6 por ciento. (EFE /NTX)