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Cuando se padece diabetes, los niveles de azucar en la sangre suben, entonces empieza un problema de circulación en la sangre a nivel de todo el cuerpo; los organos más afectados son la retina, luego el riñon, y en tercer lugar, el cerebro. Al no circular la sangre de manera adecuada y no alcanzar a oxigenar esos tejidos, el paciente comienza a experimentar una baja visual —a ver borroso— y a la larga tendrá sangrados o hemorragias dentro del globo ocular que lo llevan a una pérdida de la visión, dio a conocer el Dr. Carlos Pedro Gonzalez Cervantes, jefe de oftamología del Hospital Benito Juárez del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Agregó que la retinopatía diabética es, dentro de las enfermedades de los ojos, la que más alto aumento registra debido a que los pacientes diabéticos también van en aumento; además de que viven más años, lo que aumenta el índice de complicaciones.
Destacó que de los 1,200 pacientes diabéticos nuevos que se atienden mensualmente, entre 400 o 450 requieren tratamiento por problemas de la visión.
Expresó que en las complicaciones de la diabetes, la retinopatía ocupa el primer lugar. Aproximadamente 60% de los diabéticos que tienen 10 año con la enfermedad, registran afectación ocular.
Explicó que al igual que la diabetes, la retinopatía no da síntomas en sus fases iniciales. El paciente se siente y ve bien.
—Para descartar que tenga retinopatías es necesario hacer una revisión oftalmológica que, junto con algunos datos clínicos, como la baja visual —el más importante— y la presencia de "flotadores" —el paciente ve telarañas u objetos que flotan en su campo visual, que son en realidad pequeñas gotas de sangre— nos ayuden a determinar si se trata de retinopatía diabética.
Manifestó que cuando la retinopatía diabética está en su fase inicial, el paciente puede recibir tratamiento preventivo, como la fotocoagulación láser en la retina; una medida que no mejora la visión como tal, pero detiene el proceso de la retinopatía y permite a los pacientes continuar con buena visión el resto de su vida.
—De eso se trata, de "pescar" a los pacientes que están en fases iniciales para tratar de detener la enfermedad en fases que no afectan la visión. Cuando esto no es posible, el siguiente manejo es la cirugía, que se utiliza cuando el sangrado es abudante y no permite la aplicación del láser, por lo que hay que operar para lavar la cavidad del ojo y quitar el sangrado.
A una pregunta, dijo que entre 5 y 10% de los 400 o 450 pacientes diabéticos nuevos que se atienden mensualmente por problemas de visión, pierden la vista, sin importar los esfuerzos médicos. Esto se debe a que la retinopatía diabética como tal no es una enfermedad propia del ojo, sino una consecuencia de la diabetes. Así que mientras el paciente no controle su cuadro de diabetes, este va a seguir el avance de la patología.
Señaló que para evitar que eso suceda, el IMSS cuenta con un programa prioritario llamado Prevenimss en el que se maneja al paciente de forma integral, en todas sus patologías; tratando en primer lugar de prevenir las enfermedades y en segundo lugar, las complicaciones, cuando ya se presenta la enfermedad.
Precisó que los pacientes diabéticos ocupan 60% del programa Prevenimss, con un lugar muy importante del presupuesto de ese programa, que va encaminado a combatir las complicaciones del paciente para mejorar su calidad de vida. Mensualmente, Prevenimss envía a consulta a 1,200 pacientes nuevos, de los cuales todos son revisados para identificar a tiempo posibles problemas oculares.
Sobre el tratamiento preventivo para evitar la retinopatía, indicó que resulta básico el control de la diabetes y no solo para mantener bajos los niveles de azúcar, sino para lograr la estabilidad de esos niveles. La mejor manera de lograrlo es apegándose a la dieta asignada por su médico y haciendo ejercicio.
—Los pacientesj, entre más obesos o con sobre peso estén, más inestable es su enfermedad. Entre mejor hagan su ejercicio y cuiden su alimentación, más estabilidad van a tener en sus niveles de glicemia y menor índice de complicaciones.
Finalmente, dio a conocer que hay avances con medicamentos nuevos que están en el mercado desde hace aproximadamente tres o cuatro años, que el IMSS ya está incorporando a su cuadro básico. Ese tipo de medicamentos logran que los pacientes recuperen visión, lo que no se había logrado nunca.
—Los tratamientos que teníamos estaban encaminados a detener la enfermedad sin regresarle la visión al paciente, pero con los nuevos medicamentos que está incorporando el instituto vamos a lograr que recuperen visión algún porcentaje de pacientes. L.I.