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José Ayala Aldana alza la voz: pido a Renán Barrera que como máxima autoridad municipal haga justicia y ponga las cosas en orden y ordene dar de baja de la policía municipal a los agentes de esta corporación que me agredieron con lujo de violencia, fracturándome dos costillas, a raíz de una protesta que realizamos un compañero y yo, en ejercicio de nuestra libertad de expresión.
Pepe Ayala detenido con lujo de violencia por elementos de la policía municipal por protestar contra el endeudamiento del estado
Ayala Aldana, un sencillo mecánico identificado con las mejores causas a favor de la comunidad, recordó que el 12 de octubre de 2010, en compañía del conocido activista Rafael Gamboa Moguel, realizó una manifestación frente a palacio de gobierno, protestando por el endeudamiento excesivo contratado por la entonces gobernadora Ivonne Ortega Pacheco y solicitando se transparentara el destino de los fondos contratados. Ayala Aldana participó en la protesta brindando apoyo logístico y técnico a Gamboa Moguel para realizar la manifestación
Gamboa Moguel bloqueó la calle 61 por 60 con la camioneta Aerostar XLT con placas YZP3550. Para ello, estacionó su vehículo sobre el paso peatonal y detuvo el tránsito de la calle 61 de oriente a poniente.
A las 11:30 llegó la grúa 406 de la Policía Municipal de Mérida para quitar el vehículo y reabrir la circulación en la vía; sin embargo, Gamboa Moguel y Ayala Aldana trataron de dialogar con los elementos policiacos y de impedir la acción de los agentes, por lo que fueron separados por la fuerza del automotor.
Rafael Gamboa es tratado de bajar de su vehículo a viva fuerza por elementos de la policía municipal
Cuando la grúa municipal trasladaba el vehículo al corralón, Gamboa Moguel se introdujo a su camioneta en movimiento para recuperar una computadora y otras pertenencias, que había dejado en el interior de su camioneta.
El manifestante se metió por la puerta del copiloto y rescató su laptop, mientras que Ayala Aldana entró por el acceso del piloto y accionó el freno de mano.
Gamboa Moguel pudo eludir la detención de los uniformados, no así Ayala Aldana que fue sometido por varios elementos, pese a que no ofreció resistencia y metido a la fuerza a una patrulla, donde fue salvajemente golpeado, resultando con dos costillas fracturadas como consecuencia de la brutalidad policiaca.
En tal virtud, Ayala Aldana solicitó al alcalde la baja inmediata de los elementos que lo agredieron brutal e injustificadamente, toda vez que consta de manera pública y notoria que no opuso resistencia ni agredió a nadie, como falsamente se consignó en el parte que rindió la policía municipal.
Participar en esta protesta como elemento de apoyo logístico, le valió una golpiza a José Ayala Aldana
Ayala Aldana rememoró que el día de la toma de posesión de Renán Barrera, se topó con uno de los elementos que lo agredieron, que al percatarse de su presencia, no buscaba donde meterse y apenas tuvo oportunidad, tomó las de Villadiego.
Pido al alcalde la baja de estos malos policías, no como resultado de un ajuste de cuentas de carácter particular, sino porque una ciudad accesible y amable para todos sus ciudadanos, no puede tener una policía brutal e irrespetuosa de los derechos civiles de sus ciudadanos.
Estoy dispuesto a reunirme con el alcalde y el director de la policía municipal para aportar los elementos de prueba que consigan dar de baja a los malos elementos que me agredieron brutal e injustificadamente: José Ayala Aldana
Me queda claro que quizá el alcalde no tenga los hechos frescos en su memoria, pero por eso hay que ayudarle a recordarlos. Acontecimientos como el mío o lo sucedido el cuatro de julio en la prolongación de Paseo de Montejo, no pueden quedar impunes, porque vulneran los más sagrados y elementales derechos, que son la libre expresión de las ideas y la asociación para asuntos de carácter político.
Ayala Aldana dijo estar dispuesto a entrevistarse con el alcalde y con el director de la policía municipal para aportar todos los elementos de prueba que sean necesarios para lograr la baja de los malos elementos policiacos, que con sus abusos solamente desprestigian a la corporación y al ayuntamiento.