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ROMA, 9 de diciembre.- Considerado muerto políticamente desde hace meses, y a pesar de las encuestas que le son desfavorables, el exjefe del gobierno italiano Silvio Berlusconi esbozó un enésimo retorno al ruedo del poder que hace añicos el frágil equilibrio político en Italia.
Berlusconi, de 76 años, quien anunció el sábado que se presentará nuevamente al cargo de jefe de gobierno en 2013, probablemente base su campaña electoral en los impuestos que considera demasiado elevados para la clase media, el crecimiento económico, en momentos en que Italia está en recesión, y críticas a la Unión Europea, que se somete demasiado, según él, a lo que desea Alemania.
"Hacía falta un líder como el Berlusconi de 1994, pero no lo hemos encontrado", explicó refiriéndose a su entrada en política, para justificar su regreso a la arena política.
No obstante, los sondeos son muy desfavorables para el exjefe de gobierno y su formación, el Pueblo de la Libertad (PDL), podría dividirse entre un ala moderada y otra más derechista. Así, un sondeo reciente del Instituto SWG le da menos del 14% de las intenciones de voto en las próximas legislativas, pese a que en las de 2008 ganó triunfalmente con un 38%.
En octubre de 2011, el 'Cavaliere' tuvo que ceder a la presión política y de los mercados financieros para dejar el poder. Desde noviembre de 2011, el partido Pueblo de la Libertad (PDL) había apoyado al gobierno de tecnócratas de Mario Monti, en una alianza inédita con el centroizquierda.
"Hemos hecho gala de una gran responsabilidad y, durante un año, hemos apoyado este gobierno intentando corregir las medidas que no nos convencen. Pero también afirmando siempre que una política de austeridad en una economía que no crece provoca daños", explicó Berlusconi.
"Todas las cifras son peores que hace un año", aseguró Berlusconi, añadiendo que su partido votará los textos actualmente examinados en el Parlamento, empezando por la ley presupuestaria.
Todavía a finales de octubre, el magnate y dueño del imperio televisivo Mediaset, debilitado por sus problemas con la justicia, había anunciado que renunciaba a presentarse como candidato al cargo de jefe de gobierno.
"Entro en escena para ganar", declaró ante la prensa cerca de Milán (norte) el 'Cavaliere', que hace poco más de un mes aseguraba que no concurriría a los comicios. "Estoy acosado de demandas de los míos para volver al primer plano", explicó, afirmando que quiere salvar a una "Italia al borde del precipicio" y minada por el desempleo y los impuestos.
Berlusconi anunció que quiere presentar en las legislativas "muchas caras nuevas" y afirmó que, en ese sentido, ya ha tomado contacto con el mundo empresarial, los deportes y la universidad para buscar candidaturas.
"Todo esto nos hace regresar a un clima que creíamos haber superado", lamentó el domingo el director del diario Il Messaggero, Mario Orfeo, en momentos en que gran parte de la prensa calificaba de "dramática" la nueva "cruzada de Berlusconi".
Incluso expartidarios del 'Cavaliere', como el exministro de Relaciones Exteriors Franco Frattini, se han distanciado de Berlusconi.
"Regresamos a hace 20 años", lamentó Mario Mauro, líder del PDL en el Parlamento Europeo.
"Es un error, es incomprensible", declaró por su parte la exministra de la Juventud de Berlusconi Giorgia Meloni, de 35 años de edad, quien tenía planeado presentarse a las primarias del partido para elegir al candidato conservador.
El ejecutivo tecnócrata de Mario Monti debía en cualquier caso concluir en la próxima primavera. Las elecciones legislativas se esperan en principio en marzo o abril.
Los últimos sondeos pronostican una victoria del Partido Democrático (PD), de centroizquierda, pero sin mayoría absoluta, lo que lo obligaría a buscar una coalición. (AFP)