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CIUDAD DE MÉXICO, 10 de abril.- A pesar de las iniciativas que buscan desincentivar el consumo de refrescos en México, su venta creció 2.18 por ciento, al cierre del año pasado, al tomar en cuenta sus diferentes presentaciones de refrescos de cola y de sabores, según la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera del Inegi.
En forma global, en México cerca de 7 de cada 10 bebidas que se venden son refrescos, mientras que los tres restantes son energéticas, deportivas, aguas envasadas o jugos, según datos del Inegi.
El año pasado, diversas organizaciones apoyaron iniciativas que buscaban desincentivar el consumo de refrescos en México.
La Fundación Mídete dio a conocer una iniciativa de ley que propone un impuesto de 20 por ciento a los refrescos, la cual ya está en la Cámara de Diputados.
"En México, no se han implementado políticas públicas destinadas a desincentivar el consumo de refrescos. Es por eso que como sociedad civil propusimos medidas, como la del año pasado, de un impuesto de 20 por ciento al refresco, con lo que se esperaría que el consumo baje en 40 litros menos por persona", dijo Ahtziri González de la Fundación Mídete.
Alejandro Calvillo, de la asociación Al Consumidor, aseguró que aunque el año pasado se identificaron diversas iniciativas para disminuir el consumo de refrescos, no se han obtenido grandes resultados, pero hace falta reglamentarlas y hacerlas obligatorias.
"No hay una regulación, aunque en el Pacto Por México, la Reforma Educativa y el acuerdo 10 por la Infancia se establecieron compromisos para garantizar el acceso a alimentos saludables, con lo que esperamos que venga pronto una regulación, que podría servir para desincentivar el consumo de refrescos", dijo Calvillo.
Pedro Padierna, presidente de Pepsico México, aseguró que los consumidores cobraron una mayor consciencia sobre sus compras, lo que, entre otros factores, provocó que en general la tasa de crecimiento de la venta de refrescos se moderara.
A detalle, la venta de refrescos de cola retornables registró un alza de 5.25 por ciento; la de bebidas de cola no retornable, 3.55 por ciento; la de refrescos de cola de lata, 1.28 por ciento, y la de bebidas de sabores no retornables reportó un alza de 0.3 por ciento anual, al cierre del 2012, en comparación con el mismo periodo de 2011.
De los 19 mil millones de litros de refrescos, alrededor de 4 mil 225 millones son bebidas de cola retornables; 8 mil 579 millones de litros de cola no retornable; 4 mil 886 millones de litros son refrescos de sabores, principalmente. (Reforma)