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MÉRIDA, Yucatán, 11 de abril.- El Ayuntamiento, por medio de la Policía Municipal, resguarda y protege el mayor tesoro que tienen los meridanos: sus niños.
En la zona que tiene asignada para su vigilancia, las primeras 144 manzanas del Centro Histórico, los agentes municipales protegen todos los días hábiles la entrada y salida y están pendientes de la seguridad de los pequeños estudiantes.
Elementos de la Policía Municipal de Mérida aplican los días de clases un dispositivo de seguridad pública y vialidad en los planteles educativos del primer cuadro, a fin de agilizar la vialidad y salvaguardar la integridad física de los alumnos.
En total, la corporación policial se encarga de dar seguridad durante la entrada y salida de clases a los alumnos de 25 planteles educativos del primer cuadro de la ciudad.
—La ayuda que brinda la Policía Municipal para controlar el tránsito a las puertas de las escuelas es muy importante porque eso nos garantiza la seguridad de nuestros hijos y de nosotros mismos —afirma la señora Ana Alonzo, vecina de Mulchechén.
La corporación policial se encarga de dar seguridad a 25 planteles del Centro Histórico.
Entrevistada a las puertas de la primaria Distrito Federal, en la calle 57, entre 48 y 50, cuando acudió por sus hijos, la señora Alonzo comenta que la presencia de los agentes a las horas de entrada y salida de las escuelas mantiene la seguridad para todos los niños y de esta manera los padres de familia se sienten tranquilos.
—Me parece muy bien la tarea que hace, sobre todo en esta calle que es muy transitada —indica—. Los niños pueden salir y cruzar la calle de manera segura.
La señora Leonor, vecina del Centro, fue a recoger a sus nietos a la citada escuela y señala que es muy positiva la presencia de la Policía Municipal.
—Me parece bien que la Policía Municipal cuide a los niños porque eso nos brinda la seguridad de que no serán víctimas de un accidente o algún otro hecho—señala.
—Están haciendo un buen trabajo y estamos muy contentos por eso —asegura.
Por su parte, Manuel y Leonardo, alumnos de ese centro escolar, agradecen a los agentes que los ayuden a cruzar la calle y “nos cuiden de los vagos”.
—Nos cuidan, nos ayudan a cruzar la calle y nos protegen de los vagos —agrega Leonardo.
Los uniformes de los oficiales de la Policía Municipal de Mérida (PMM).
Por su parte, el policía municipal Jaime Ruiz, asignado al grupo DARE, afirma que una de las mayores satisfacciones del trabajo que realizan a las puertas de las escuelas es el agradecimiento de los niños, así como el respeto y la confianza que tienen hacia los agentes.
Sugiere a los padres de familia que también colaboren inculcando medidas de seguridad a los pequeños.
—Para mí esta labor es muy importante, como policía y como padre de familia —subraya.
Durante el operativo de seguridad a cargo de la Policía Municipal a las puertas de las escuelas, se establecen zonas de ascenso y descenso de alumnos y se vigila que se respeten los pasos peatonales.
Entrevistada a las puertas de la Primaria Distrito Federal, en la calle 57 entre 48 y 50, la señora Alonzo dijo quegraciasa los agentes municipales los padres de familia se sienten tranquilos.
Independientemente de la labor de los agentes asignados a las puertas de las escuelas, policías a bordo de vehículos recorren las calles y apoyan a los planteles educativos en zonas con alto aforo vehicular.
Asimismo, la Policía Municipal exhorta a los padres de familia a evitar estacionarse en doble fila o a menos de 15 metros de las esquinas; a respetar las zonas señaladas con conos para el ascenso y descenso de los alumnos, a obedecer los señalamientos de los policías municipales y a ceder el paso a los peatones.
Del mismo modo, a los conductores se les pide que detengan su marcha en los pasos peatonales y a disminuir su velocidad al transitar por las zonas escolares.