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CIUDAD DE MÉXICO, 7 de mayo.- Es común escuchar frases como: “Para ahorrar, necesito ganar más dinero”, “Si me ganara la lotería, tendría lo suficiente para ahorrar”, “Quiero ahorrar, pero el dinero no alcanza”... y es que cada vez que se reciben los ingresos, desaparecen de manera inmediata. Y al final ¿cómo ahorrar si ni siquiera vemos el dinero?
El presupuesto familiar es la herramienta que te permitirá identificar de dónde viene, a dónde va y cómo se mueve tu dinero. La meta no es castigarte a ti o a tu familia, por el contrario, es mantener los sueños y las metas verdaderamente vivos.
Para elaborar tu presupuesto familiar, sigue estos siete sencillos pasos:
1.- Cuestiona tus necesidades y deseos, pregúntate: ¿qué es lo que deseo? y ¿qué es lo que realmente necesito? Elabora dos listas: una de necesidades y otra de deseos.
2.- Identifica tus prioridades, en cuanto a los gastos y necesidades como pueden ser: ahorro, alimentación, salud, transporte, educación, etc.
3.- Suma todos tus ingresos mensuales, ya que de esa manera sabrás a cuánto ascienden tus entradas de dinero.
Algunos consejos para ahorrar: Por cada 10 monedas, gasta solamente 9; la otra ahórrala. Obtén tu propia casa. Asegura un ingreso futuro. Haz provisiones para las necesidades de tu vejez y la protección de tu familia. Aumenta tu habilidad para ganar.
4.- Establece un monto considerable para destinar al ahorro, lo ideal es destinar un 10% de tus ingresos mensuales, pero si al inicio esto no es posible, considera un monto menor sin que sea tan bajo, teniendo en mente que la meta será llegar a ahorrar un peso por cada diez que recibas.
5.- Determina cuáles son tus gastos, la mejor manera de hacerlo en la práctica es anotar durante un mes cada peso que gastas. Clasifica los gastos según tus necesidades y deseos. ¿Cómo gastas tu dinero normalmente? y ¿en qué?
6.- Calcula la diferencia. Ya creado tu presupuesto, mantén un registro de tus ingresos y gastos reales. Si tus gastos son mayores a tus ingresos, significa que tu economía no es sana y tarde o temprano las deudas te agobiarán. Es momento de hacer ajustes, sólo así podrás vivir tranquilamente.
7.- Lleva un registro, reduce y determina objetivos. Al principio, reducir es una mejor opción que eliminar completamente el gasto. Sé realista. Conforme esto vaya ocurriendo, podrás AHORRAR una cantidad mayor y con ello estar mejor preparado para enfrentar gastos inesperados.
El secreto está en vivir bien dentro de tus posibilidades, es decir, gastar menos de tus ingresos para no rebasarlos.
Lo ideal es ahorrar el 10% de tus ingresos.
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