TORREON, Coahuila, 13 de abril.- El colombiano Carlos Darwin Quintero fue el verdugo del Atlante este domingo al marcar tres de los cuatro goles con los que Santos Laguna condenó a los Potros al descenso.

Pese a que los azulgranas pelearon hasta el último minuto, Quintero se encargó de mantener la ventaja lagunera en el marcador desde el minuto 18.

Cuando el colombiano puso el segundo y se respiraba una goleada, Ángel Sepúlveda descontó para los de Cancún en la parte complementaria. Pero José Javier Abella amplió la distancia para los Guerreros.

En la recta final, Luis Madrigal acercó de nueva cuenta al Atlante, solo por unos segundos puesto que Quintero enterró toda esperanza al concretar su triplete.

Todavía Madrigal hizo el tercer tanto azulgrana en tiempo de compensación, aunque ya no fue suficiente para salvar al cuadro del descenso, al quedarse con 0.9800 y estancarse en 98 unidades en 100 partidos, y aunque está a seis de distancia del Puebla (1.0400, con 104 puntos en 100 juegos) la diferencia de goleo de más de 30 anotaciones, lo mandan de manera virtual a la liga de ascenso.

El triunfo le da a los de La Comarca 24 puntos que lo colocan en tercer puesto general, en vías de enfrentar al Lanús de Argentina en Octavos de Final de la Copa Libertadores.

Atlante consumó seis torneos de fracasos absolutos.

Los Potros jugarán a partir del próximo Torneo Apertura 2014 en la Liga de Ascenso.

Años y años de historia de uno de los equipos de más tradición en el fútbol mexicano quedaron en el olvido, pues esta noche Atlante descendió.

La derrota por 4-3 ante Santos Laguna fue el último clavo al ataúd y el pasaporte final a la Liga de Ascenso.

Un total de seis torneos para el olvido fue el saldo que dejó como consecuencia la perdida de la categoría de un añejo equipo fundado en 1916.

Oficialmente, Atlante todavía puede empatar en puntos con el Puebla; sin embargo, la diferencia de goles es abismal, de más de 20 goles, por lo que es prácticamente imposible que puede conseguirlo.

Apenas hace 13 años, Atlante también había descendido; sin embargo, en ese entonces tuvo la fortuna de que la liga estaba por expandirse a 20 equipos y tras pagar una millonaria multa, tuvo derecho a jugar una serie ante Veracruz, campeón de la Primera A, para mantenerse en Primera División.

Previamente, en la 1989-1990, los Potros descendieron a la Segunda División, aunque fue vuelta fue tan sólo una temporada después.

Hoy, miles de aficionados lloran el descenso de un añejo equipo de tradición, que pese a no ser ganador como otros, gozaba de gran simpatía en el fútbol mexicano. (Agencias)